CiU y ERC prevén cerrar este viernes los últimos "flecos" en las negociaciones para presentar este sábado, en una carrera contrarreloj, un pacto de estabilidad parlamentaria a los consejos nacionales de CDC, UDC y ERC, que deberán rubricar el acuerdo para investir de nuevo a Artur Mas presidente catalán.

Esquerra ha presentado una propuesta a CiU, a la que ha tenido acceso El País, que incluye 60 medidas para la "transición nacional" cuyo objetivo, además de salir de la crisis, es la creación en Cataluña de infraestructuras de Estado como una agencia tributaria, un banco nacional antes de que llegue la consulta de autodeterminación, prevista para 2014.

El plan de ERC incluye una "ley de consultas" que permita preguntar a los catalanes "si quieren seguir formando parte de España". La ley buscaría sortear al Tribunal Constitucional. En concreto hablan de una consulta "no vinculante" que dejara claro si los catalanes desean seguir perteneciendo a España, explica el diario.

En 2013, la izquierda independentista propone a CiU la la creación de la administración tributaria con todas las competencias. El plan también contempla la creación del "Banco de Cataluña", una banca pública cuyo objetivo sería "garantizar el acceso al crédito por parte de la economía productiva".

Mas firmó est jueves el decreto para la constitución del nuevo Parlament, que tendrá lugar el próximo lunes 17 y que marca oficialmente el inicio del calendario parlamentario para volverlo a investir presidente de la Generalitat, previsiblemente a finales de semana que viene.

La firma del decreto no significa que el pacto de estabilidad entre CiU y ERC esté completamente cerrado, aunque fuentes conocedoras de las negociaciones dan por hecho que se zanjará un principio de acuerdo este viernes.

Tras haber limado las diferencias en el capítulo de la consulta soberanista, los últimos esfuerzos se centran en acercar posiciones en algunas figuras fiscales para incrementar los ingresos de la Generalitat ante un 2013 en el que el Govern prevé más de 4.000 millones de euros de recortes en el gasto presupuestario.

Ambas formaciones están a favor de la recuperación parcial del impuesto de sucesiones, y lo único que falta por determinar es si sólo gravará las rentas más altas, tal y como aprobó el gobierno tripartito, o bien se extenderá algo más para aumentar la recaudación, según las fuentes consultadas de la negociación.

También está muy cerca el acuerdo para la implantación de otros impuestos, como el de patrimonio, o el que gravaría las centrales nucleares, y también el que ERC propone que paguen las grandes superficies comerciales.

Con respecto a la consulta de autodeterminación, CiU y ERC estudian la posibilidad de que la convocatoria pudiera coincidir con la que tendrá lugar en Escocia en otoño de 2014, aunque en el texto del acuerdo no figure una mención expresa de la fecha.

Acabado este trámite, que habitualmente ocupa una jornada, el debate de investidura de Mas se podría celebrar entre miércoles y viernes, mientras que la toma de posesión y la formación de Govern tendrían lugar la última semana del año.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado en una rueda de prensa en Bruselas tras la celebración del Consejo Europeo que está "preocupado" por lo que lee estos días "en los periódicos de Cataluña" acerca del pacto y el referéndum, aunque ha añadido que no sabe "si eso está cerrado".

El jefe del Ejecutivo ha precisado que él desconoce el contenido concreto del acuerdo entre CiU y ERC, pero ha señalado que lo que ha podido leer hasta ahora es lo que le lleva a expresar esa preocupación y a mostrar su desacuerdo con ello. Además, ha considerado que esa sensación la comparte también la inmensa mayoría de ciudadanos.

"Pero como no sé si se ha cerrado el acuerdo o no, no me voy a posicionar más sobre ello", ha añadido Rajoy, antes de recalcar que la prioridad tanto en el conjunto de España como en Cataluña es la lucha contra la crisis económica, el crecimiento y la creación de empleo.

A eso cree que deberían dedicarse todos los gobiernos, tanto el central, como los autonómicos y locales, al tiempo que ha subrayado que para luchar contra la crisis es muy importante no introducir factores de inestabilidad política. "Eso no ayuda absolutamente nada", ha concluido.