La alarma saltó en en verano. En el Reino Unido, Barclays había manipulado el Libor (el euríbor inglés) y el euríbor en su beneficio. Los reguladores británico y estadounidense multaron a Barclays con 360 millones de euros.

Los tipos Libor y euríbor son calculados a partir de los datos suministrados diariamente por una muestra de bancos comerciales. Por lo tanto, ¿quién nos asegura que el euríbor no está siendo también manipulado en el resto de Europa?

Ante los diversos requerimientos, la Comisión Europea (CE) propuso en julio tipificar como delito la manipulación de índices de referencia para los tipos de interés, como el euríbor o el Libor, y castigar incluso con penas de cárcel los casos más graves. La pasada semana, los ministros de Justicia de los Veintisiete acordaron adoptar esas medidas.

La CE no propone los tipos de sanciones penales y sus niveles mínimos que deben aplicar los países miembros de la UE, pero éstos tendrán que inscribir en el código penal la manipulación directa de los índices de referencia –como el euríbor–, la incitación y la participación en este delito y el intento de amañar esos indicadores, así como establecer sanciones penales efectivas.

Pero ahora Bruselas va a ir más allá. Según informa el diario The Wall Street Journal, la Comisión Europea está a punto de acusar a varios bancos por la manipulación del euríbor. La CE sospecha que el Barclays está en el origen de un acuerdo para manipular estos índices que sirven para establecer el precio de los créditos y las hipotecas.

De hecho, las autoridades europeas llevan un año investigando posibles manipulaciones presuntamente llevadas a cabo por una docena de bancos entre 2005 y 2008 –entre ellos, el HSBC, el Deutsche Bank, la Société Générale o el Crédit Agricole–.

Es el índice que marca el tipo de interés medio al que se prestan dinero entre sí las distintas entidades bancarias europeas. Está presente en más del 80% de las 18 millones de hipotecas (las de tipo variable) firmadas en España.

El valor del euribor lo hace público una empresa privada (Thomson Reuters), con la supervisión posterior de la Federación de Banca Europea (EBF-Euribor), que recopila los datos diarios de 44 bancos, entre ellos cuatro españoles. Por tanto, el Banco de España no interviene, solo publica las cifras que le llegan.