La Declaración de Mérida aprobada dentro de la XVI Asamblea de la Conferencia de Asambleas Legislativas Regionales Europeas (CALRE), clausurada este viernes en el Parlamento de Extremadura, sostiene que las asambleas legislativas regionales están "legitimadas" para participar de forma "activa" en el proceso de toma de decisiones de la Unión Europea.

Al mismo tiempo, la CALRE reconoce que "aún queda un largo camino que recorrer para alcanzar el mejor marco de gobernanza multinivel dentro del sistema comunitario", así como que el papel de aquéllas "puede mejorarse".

Además, la Conferencia, a través de dicha declaración, defiende que la intervención de los parlamentos regionales a nivel comunitario es "necesaria" para "reforzar" a la Unión Europea de "mayor legitimidad democrática".

Así, entiende que deben crearse las "condiciones" para que los parlamentos regionales a nivel comunitario puedan desarrollar "eficazmente" sus funciones y adoptar medidas encaminadas a mejorar el acceso a la información, "con el fin último de lograr que estén capacitados para exigir las correspondientes responsabilidades políticas en la toma de decisiones".