La dirección del PSOE-A ha manifestado este lunes, al hilo del resultado de las elecciones en Cataluña, que estará "vigilante" para garantizar que los derechos que Andalucía consiguió en término de autonomía y de autogobierno el 28 de febrero sigan "plenamentes vigentes" y que ninguna "tentación de radicales pueda desviar el foco" de esa capacidad de centrar la política en España que tiene esta tierra.

En rueda de prensa, el vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez, ha insistido en que tanto el partido como el Gobierno andaluz estarán vigilantes para que Andalucía sea determinante en la organización de la convivencia en el conjunto del Estado. "Desde el punto de vista institucional y político, Andalucía va a jugar sí o sí", ha apuntado.

Ha recalcado que en ese terreno hay que estar vigilantes, "con serenidad y con tranquilidad", y ha garantizado que Andalucía va a estar "bien defendida" en términos de autonomía y autogobierno por su presidente, José Antonio Griñán.

Mario Jiménez ha manifestado que en las elecciones de Cataluña los "radicalismos" se han hecho con el terreno de juego y han conducido a un resultado que "prefigura un mapa político muy complejo, que puede tener elementos verdaderamente complicados para el conjunto del Estado español y para la convivencia en el país".

Para Jiménez, el "gran derrotado" de las elecciones fue el candidato de CiU a la reelección como presidente de la Generalitat, Artur Mas, y su "estrategia y deriva soberanista irresponsable, que solo ha servido para alimentar posiciones radicales".

Ha indicado que hoy el Parlamento catalán tiene una mayor representación de los partidos nacionalista, "pero con una deriva hacia posiciones muy radicales que pueden complicar la gobernabilidad de la comunidad y pueden pretender alterar la convivencia y el entendimiento del conjunto del Estado español y de Cataluña con éste".

Ha manifestado que es muy importante que, frente a tanta "radicalidad, demagogia y mentira", haya una respuesta del conjunto del Estado español llamando a la sociedad catalana a la convivencia, que tiene que ser respetuosa con la diferencia, pero que ante todo, tiene que ser pacífica en el conjunto del Estado".

En su opinión, a partir de ahora, lo que cabe es tender puentes y garantizar un diálogo fluido para hacer posible esa convivencia de Cataluña en España, con el respeto a las normas y al principio de igualdad para el conjunto de los españoles.

Asimismo, ha estimado que hay que acabar con la "radicalidad" del Gobierno central y el "juego sucio por parte de aquellos que consideran que cualquier mecanismo es posible con tal de conseguir determinados resultados electorales".

Ha indicado que en este contexto, va a ser fundamental el papel "moderador" del PSOE para conseguir que el "sentido común, el diálogo y el respeto a las normas constitucionales y al principio de igualdad sea el camino de la solución de los problemas que puedan plantearse en estos momentos en España".

En su opinión, para que ello sea posible, el PSOE tiene que estar unido y fuerte y marcar claramente un "proyecto ilusionante e inclusivo, alejado de

inmovilismo y que integre al conjunto de la ciudadanos del país para garantizar que los ciudadanos tienen en la izquierda una referencia clara de progreso y de convivencia pacífica dentro de la ley".