Trabajadores prejubilados de Santana en 2001, pertenecientes a la Asociación 28 de Febrero han solicitado al Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, reunirse para que conozca la situación que están padeciendo, después de que la pasada semana se haya convalidado el decreto ley en el que la Junta asume el pago directo de las ayudas sociolaborales a los exsantaneros, un documento que "desprotege" a este colectivo de prejubilados.

Fuentes de la asociación han explicado a Europa Press que este encierro, que tendrá lugar hasta la celebración del próximo pleno del Parlamento andaluz, en el que se prevé que IU pregunte por su situación al consejero de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, Antonio Ávila, tiene por objeto que la Administración andaluza dé "una explicación" en cuanto a que estos extrabajadores dejen de percibir el complemento vitalicio proveniente de la aseguradora.

"Ávila se ha olvidado de actuar como jiennense y como socialista". "Tendremos una reunión permanente para ver si alguien de la Junta o de los sindicatos se ponen en contacto con nosotros y nos dicen qué van a hacer con nosotros", ya que, "los silencios son muy sospechosos". Además, según han recordado las fuentes, "hemos estado peleando para ser excluidos del decreto, que solo beneficia a los compañeros del acuerdo de 2011, pero sorprendentemente el documento se ha convalidado".

Este colectivo "solo pide que el Gobierno andaluz diga que está buscando una solución, pero ni siquiera se digna a decirlo". Por ello, este miércoles se reunirá con el parlamentario de IU por Jaén, que "empezó la lucha para buscar la solución que le han dado a los extrabajadores del Plan Linares Futuro". Ahora, esperan que Ávila "explique qué piensa hacer y cómo piensa solucionar los daños colaterales del decreto".

De otro lado, las fuentes han recordado que desde la mencionada Consejería se les ha instado a que "vayan a los tribunales", algo que "no se plantean" porque, "aunque ganen, empezarían a recurrir y cobrarían el dinero el Día de Todos los Santos en el cementerio en flores", han lamentado, toda vez que muchos de los prejubilados en 2001 alcanzan los 70 años de edad.