El alcalde de Lugo, José Clemente López Orozco, ha afirmado este martes que el Ayuntamiento funciona con "toda normalidad", pese a la imputación por cohecho y prevaricación de la que tendrá que responder el jueves ante la jueza del uno, Pilar de Lara Cifuentes, en el marco de la operación Pokémon y que llevó este lunes a suspender hasta el viernes el pleno sobre el estado del municipio.

Precisamente, este martes, el BNG de Lugo reúne a su asamblea local para adoptar una decisión sobre el futuro de la coalición, después de que los nacionalistas ya hayan pedido la dimisión del regidor por su imputación, así como de que el portavoz nacional del Bloque, Guillerme Vázquez, hubiese dado por roto el pacto de gobierno si el alcalde continúa al frente.

Con todo, fuentes nacionalistas han explicado que, además de la decisión que se adopte en la asamblea local, habrá que esperar a lo que ocurra el jueves, cuando declare el alcalde ante la jueza que instruye este caso.

Orozco ha evitado hablar de la imputación ante los periodistas, en un acto de Unicef, y de las consecuencias que pueda traer para su gobierno.

"Con toda normalidad y muy agradecidos a Unicef por este aire nuevo que nos trae al ayuntamiento como hace todos los años", se limitó a decir el alcalde, imputado por presuntos delitos de cohecho y tráfico de influencias.

Con respecto a la suspensión del debate sobre el estado del ayuntamiento previsto para este jueves, ha esgrimido que "ya está dicho todo lo que había que decir". "Se trata de un acto muy importante y por tanto se realizará en tiempo y en forma", ha señalado, en referencia a que este debate tendrá lugar el viernes.