El TS condena a un hombre a 47 años de cárcel por agredir sexualmente a mujeres en los patios de sus casas

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha condenado a un hombre a cumplir una pena de 47 años de prisión por agredir sexualmente a dos mujeres en los patios de sus casas y por intentarlo con otras tres. Tras cometer estos hechos, el procesado les robaba lo que llevaban encima, o bien dinero, o bien tabaco o teléfonos móviles.

Con esta resolución, el Alto Tribunal ha estimado parcialmente el recurso interpuesto por el abogado del procesado contra la sentencia dictada por la sección quinta de la Audiencia de Valencia, que le condenaba a 48 años y medio de cárcel por dos delitos de agresión sexual; otros tres de agresión sexual en grado de tentativa; dos delitos de lesiones; cuatro delitos de robo; y tres faltas de lesiones.

El TS ha decidido, tras estudiar el recurso de casación, suprimir las tres faltas de lesiones que se imputaban al hombre, y sustituir uno de los dos delitos de lesiones, por otro de falta. Sobre esta última circunstancia, el tribunal transforma el delito al entender que en el caso de una víctima no existía una descripción de las lesiones psíquicas, "más allá de la referencia a un estrés postraumático", que si bien fue tratado por un psiquiatra, "falta la oportuna referencia al alcance de tal tratamiento, como hubiera sido la administración de fármacos u otras técnicas terapéuticas".

Al hombre, de nacionalidad marroquí y con residencia legal en España, también se le impone la prohibición de acercarse o comunicarse con cualquiera de las cinco víctimas en sus domicilios o lugares de trabajo por un periodo de 10 años superior a las penas más graves de prisión impuestas. Además, deberá pagar una indemnización total de 50.000 euros.

Los hechos tuvieron lugar entre los meses de junio y agosto de 2009 en diversos edificios de Valencia. El primer incidente se remonta al 15 de junio, cuando sobre las 18.00 horas abordó a una joven cuando se introducía en el portal de su casa de la calle Embou. Le cogió fuertemente del cuello e intentó besarla, pero la mujer logró escapar mientras demandaba auxilio.

Seguidamente, sobre las 3.20 horas del 20 de junio, el hombre abordó a su primera víctima cuando entraba en el patio de su casa, en la calle Pizarro. El procesado le pidió un beso que no le dio, con lo que le empujó al interior y la arrojó al suelo, al tiempo que le bajaba los pantalones para luego agredirla sexualmente. Antes de marcharse, el hombre le cogió un paquete de tabaco y 15 euros en efectivo.

Ya en agosto, el día 15, sobre las 4.45 horas, el procesado abordó a otra joven cuando también se metía en su portal de la Plaza de la Merced. Le tapó la boca, le arrojó al suelo y le golpeó reiteradamente en la cabeza. Luego logró agredirla sexualmente, y antes de irse le robó el móvil y 45 euros.

El día 20, el hombre abordó a otra mujer cuando iba a entrar en el zaguán de su casa en la calle Maestro Palau, y le exigió que le entregara todo lo que llevaba. Seguidamente, intentó arrastrarla hasta una zona arrinconada en la portería, y como se resistió, le golpeó en la boca y en el estómago. Finalmente la mujer pudo huir.

El último incidente del que hay constancia es del día 22 del mismo mes, cuando el procesado abordó a otra mujer cuando entraba en el patio de su casa de la calle Doctor Manuel Candela, y la arrastró hacia un hueco junto al ascensor mientras ella gritaba. Le arrojó al suelo pero al escuchar ruido y pensar que había sido descubierto, salió corriendo del lugar y se llevó una cartera con documentación, un móvil y 15 euros.