La consellera de Educación, Formación y Empleo, María José Català, ha anunciado este domingo que 14 Institutos de Educación Secundaria (IES) de la Comunitat implantarán este curso un modelo de Formación Profesional dual con prácticas remuneradas en empresas.

En concreto, más de 200 alumnos podrán acogerse a este modelo, que se pondrá en marcha en ocho centros, como mínimo, de la provincia de Valencia, tres de Alicante y tres de la de Castellón, según ha informado la Generalitat en un comunicado.

La consellera ha realizado estas declaraciones a raíz de la aprobación por parte del Consejo de Ministros del Real Decreto que desarrolla el contrato para la formación y el aprendizaje y establece las bases de la Formación Profesional dual.

Català ha asegurado que la Comunitat apoya la nueva normativa, ya que en la Comunitat se reguló la FP Dual en la orden del 20 de julio de 2009 en cuanto a la modalidad de formación en alternancia y el actual, ha explicado, "es el segundo curso que se imparte en nuestras aulas en colaboración con las empresas".

Por ello, ha destacado que la Comunitat Valenciana es una región puntera en FP Dual, gracias a la experiencia piloto del curso pasado en el Centro Integrado Público de FP de Benicarló (CIFP), "donde se obtuvieron excelentes resultados y que ha supuesto que este curso se amplíe a otros ciclos formativos, en concreto al ciclo de dirección de cocina".

Català ha agregado que la puesta en marcha de la FP dual en la Comunitat "cuenta con el respaldo de los directores de los centros, que han expuesto su interés y la predisposición de las empresas de participar en este nuevo modelo". Así, este curso se implantará, entre otros, en los sectores de hostelería, turismo, mantenimiento electrónico y redes informáticas.

Formación y prácticas

El objetivo es "conseguir una formación conectada con el tejido productivo, que responda a las exigencias del mercado laboral", ya que con la FP Dual los alumnos combinarán las clases teóricas en el centro docente con las prácticas formativas en una empresa, para lo que se efectuarán los ajustes precisos que permiten compatibilizarlo.

Por su parte, las empresas participarán de forma activa en el proceso de formación del alumnado, de manera que se corresponda y dé una adecuada respuesta a sus necesidades. Además de aumentar las horas de formación en centros de trabajo (FCT) exigidas en el modelo tradicional, con el nuevo modelo se ofrece a los alumnos una primera experiencia remunerada, derivada de una relación laboral, una beca que sufraga la empresa o los contratos de formación y aprendizaje, según el caso que se elija.