El PSPV planteará el próximo 10 de noviembre en la Convención Municipalista que celebrará en Orihuela (Alicante) que las diputaciones provinciales, en el ejercicio de su función de "ayuntamiento de ayuntamientos", pongan en marcha una línea financiera para "auxiliar" a los consistorios, anticipándoles el pago de la deuda que mantiene con ellos la Generalitat valenciana.

Así lo ha anunciado el vicesecretario de Relaciones Institucionales del PSPV y portavoz socialista en la Diputación de Valencia, José Manuel Orengo, quien ha explicado que de este modo, las corporaciones provinciales garantizarían el pago de esa deuda procedente de "quien no se tenían que haber fiado nunca" y que mantiene "ahogados" a los ayuntamientos.

En su comparecencia ante los medios, Orengo ha apuntado que este será uno de los temas a tratar en las cuatro ponencias de la convención, a la que se prevé la asistencia de más de 800 concejales socialistas de toda la Comunitat.

Así, esta ponencia versará sobre la situación financiera de los ayuntamientos y reclamará al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, que "pague lo que debe" a los ayuntamientos en concepto de convenios como, por ejemplo, el Plan Confianza. A su juicio, el dinero procedente del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) debería priorizar estos pagos frente a las deudas con la banca.

El dirigente socialista ha tachado de "moroso, incumplidor y mal pagador" al Consell y ha criticado que sean los alcaldes quienes "vuelven a quedar como morosos cuando lo que tienen es un presidente y una Generalitat que ni paga ni da la cara".

Además, ha avanzado que este mecanismo financiero de las diputaciones "sería apoyado de corazón tanto por gente del PSOE como del resto de formaciones políticas", ya que "no hay ningún alcalde que por mucha lealtad que le tenga a su partido ponga los intereses de su partido por encima de los intereses de su ciudad".

De este modo, las diputaciones, que cuentan con cuentas "saneadas", podrían suscribir una línea de crédito con los bancos a las que los ayuntamientos no tienen acceso, ya que "el papel de la Generalitat es considerado bono basura", y las corporaciones recibirían después ese dinero cuando el Consell efectuase el pago de la deuda. Además, ha recalcado que estas tienen "una responsabilidad política, al ser del mismo color" que la Generalitat.

"Los alcaldes queremos soluciones, no monsergas y que se asuman responsabilidades", ha insistido el socialista, que ha apuntado que si el conseller de Hacienda no solventa esta situación y se ve incapaz de hacerlo, debería "irse a su casa". "Se quejan de la imagen, ¿pero qué imagen quieren cuando nos cortan la luz?", ha cuestionado Orengo

Plan de empleo

Asimismo, los socialistas abordarán en otra ponencia el derecho real y efectivo al trabajo y propondrán un plan de empleo alternativo al de la Generalitat que "multiplique por diez" los esfuerzos y la dotación, con el objetivo de llegar, como mínimo, al 10 por ciento de los parados valencianos. De hecho, ha asegurado que estos esfuerzos se verán reflejados en ayuntamientos como el de Alcoy (Alicante) que contará con 700.000 euros para políticas de fomento de empleo.

Una tercera ponencia tratará la defensa de los derechos de los ciudadanos frente a un PP "centralista" y reivindicará la dignidad de pueblos y ciudades, con más instrumentos y mayor capacidad de gestión. Así, Orengo ha manifestado su oposición a la desaparición de municipios y la reducción del número de concejales como solución a una crisis de la que los consistorios no son "ni causantes ni protagonistas". Por el contrario, ha abogado por apoyar las mancomunidades y crear economías de escala.

Democracia y transparencia

Por último, el PSPV reivindicará en su convención una mayor participación de la ciudadanía en el proyecto del partido, para conseguir "más democracia y más transparencia" y que la sociedad vea a la formación como "un instrumento" a su servicio. "La elección de los alcaldes debería ser directa por parte de la ciudadanía", ha defendido Orengo.

Asimismo, ha precisado el socialista que el objetivo de esta apertura es que personas que no sean afiliados pero estén "comprometidas" con su municipio puedan participar en la elaboración de propuestas y candidaturas. También se comprometerán los socialistas a crear un "contrato ético y de transparencia" para que aquellas medidas no incluidas en el programa electoral y que sean importantes para el municipio requieran "necesariamente" de una consulta a la ciudadanía.