Cuando algunas ONG han denunciado la frivolidad que supone alterar la legislación de países como Malawi para que personajes como Madonna puedan satisfacer su capricho de adoptar, se ha sabido que el pequeño Dave, huérfano de madre, ya ha salido del país para reunirse con la cantante pop.

El Comité Consultivo de Derechos Humanos, que agrupa a 67 organizaciones no gubernamentales , pretende que el proceso de adopción se suspenda hasta que se produzca una revisión judicial.

Según este grupo, la adopción del pequeño David Banda, de 13 meses de edad, no es ajustada a derecho porque la cantante no ha vivido nunca en Malawi. Para adoptar en el país africano es preciso residir al menos durante dos años en él.

Justin Dzonzi, presidente del Comité Consultivo de Derechos Humanos ha señalado que las leyes del país son "tajantes " en ese sentido porque "si alguien quiere a adoptar a un menor debe permanecer con el niño al menos dieciocho meses para su evaluación si Madonna quiere adoptarlo, tiene que permanecer aquí", ha dicho.

La cantante y Guy Ritchie su esposo, regresaron el pasado viernes a Londres sin el pequeño David, a la espera de que se tramitara su pasaporte. Días antes había negado oficialmente que tuviera intención de adoptar. Sus visitas a diversos orfanatos obedecían, según manifestaron sus portavoces, a motivos humanitarios. Lo cierto es que realizaron importantes donaciones a algunos de ellos, lo que, a la vista de los resultados, facilitó las gestiones de adopción del pequeño.

La cantante es madre de Lourdes, una niña de 9 años de edad que tuvo con Carlos León, su ex entrenador físico; y de Rocco, de 5 años, nacido en el seno de su matrimonio con Guy Ritchie.