La consejera de Presidencia e Igualdad, Susana Díaz, ha querido dejar claro este jueves que el presupuesto andaluz para 2013 va a tener "un trato especial" para las 400.000 familias andaluzas que no tienen nada en estos momentos porque todos su miembros se encuentran sin trabajo.

En declaraciones a los periodistas tras ser preguntada por la intención de IULV-CA —socio del PSOE-A en la Junta— se incluir en los presupuestos para 2013 "salarios sociales" para parados de larga duración, Susana Díaz ha recalcado que el principal objetivo que van a tener las cuentas del próximo ejercicio va a ser la creación de empleo porque hay 400.000 familias en este momento en Andalucía que tienen a todos sus miembros en el paro.

Ha señalado que el presupuesto de la Junta tiene que responder al empleo y "no es el momento de las grandes infraestructuras, sino de que los ciudadanos perciban que les toca a ellos".

En cualquier caso, la consejera ha precisado que hay que analizar qué capacidad hay para generar empleo en una situación muy difícil y adversa donde los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2013 no han ido por ese camino.

De otro lado, ha puesto de manifiesto que Andalucía es una comunidad cumplidora, que está arrimando el hombro en estos momentos de emergencia que está viviendo España.

En su opinión, el hecho de que el Gobierno central reconozca que las comunidades son necesarias a la solución y no son parte del problema y que haya flexibilizado su posición respecto a las mismas es un buen gesto. No obstante, ha apuntado que hay puntos que separaban a la Junta del Gobierno central y que tienen que ver con la ideología.

En cuanto a la huelga general que se desarrollará el próximo 14 de noviembre, ha manifestado que el diálogo social siempre es fundamental y que el PP en ese sentido tomó mal camino, rompiendo el diálogo social y la negociación colectiva y no sentándose con los sindicatos y los empresarios.

Susana Díaz ha insistido en que la reforma laboral aprobada por el Gobierno central solo ha traído más despidos, más precarización en el empleo y salarios más bajos. Ha confiado en que el Gobierno tome nota del malestar ciudadano y esté dispuesto a dialogar.