La abogada de Juan Manuel Morales, el joven en prisión provisional por intentar imitar la masacre de Columbine (EE UU) en la Universidad de Baleares, ha pedido este lunes por la mañana en el juzgado un examen psiquiátrico y psicológico "exhaustivo" de su cliente que servirá para determinar si "tiene algún tipo de trastorno de la personalidad".

La abogada de oficio Agustina Alonso ha confirmado que ya ha registrado la petición en el juzgado de instrucción 9 de Palma, encargado de la investigación y cuyo titular, Enrique Morell, dictó el pasado viernes prisión provisional para el joven de 21 años.

Un día después de que su cliente ingresara en prisión, imputado de los delitos de tenencia de explosivos y tentativa de estragos, Alonso afirmó que estuvo con el juez "colaborador" y "bastante comunicativo", y que contestó a todas las preguntas de las partes "sin alterarse en ningún momento".

De la breve relación profesional que ha mantenido hasta ahora con él, Alonso comentó que le ha notado "serio, tranquilo y colaborador", aunque "preocupado" por las informaciones que publican los medios de información.

El joven fue detenido en su casa de Palma el pasado miércoles tras recibir 140 kilos de explosivos con los que quería atentar contra la universidad, tal y como reconoció a la Policía.

Morales plasmó sus intenciones en un diario incautado en su casa, en el que explica que con los productos químicos pretendía fabricar varias bombas para colocarlas en la universidad.

Según explicó Alonso, Morales escribía sus amenazas para desahogarse y después se le olvidaba que quería llevarlas a cabo.

La letrada informó de que el acusado se ratificó en todo lo que había dicho horas antes a la Policía. Según su relato, explicó "que se había hecho con los 140 kilos de sustancias para fabricar explosivos y que tenía un blog en el que hablaba de su ideología", y que "en momentos de ira" plasmaba en su diario personal "lo que pensaba hacer contra los demás".

En este sentido, Alonso confirmó que el joven se llevaba mal con su padre y ha afirmado que este dice que "escribía para hacerle daño" y desahogarse", pero "una vez puesto en firme sus pensamientos, se olvidaba". "Es una persona poco comunicativa, tras escribir se quedaba tranquilo", ha dicho.

Asimismo, aseveró que cuando cursaba sus estudios de Formación Profesional fue víctima de bullying y que un profesor "no le valoraba como se debía" por lo que suspendió las prácticas. Además, le fue recetado un tratamiento con trankimazin pero no lo terminó.