La Policía Nacional ha detenido en Burjassot (Valencia) a una mujer y un hombre, de 22 y 30 años, respectivamente, como presuntos componentes de un grupo criminal que contrataba a trabajadores de forma ilegal a través de Internet, ofreciéndoles incluso montar su propia franquicia, para lo cual las víctimas debían realizar ingresos para el pago de seguros y material en la cuenta de la organización.
Según ha informado este cuerpo de seguridad en un comunicado, a los arrestados, que no cuentan con antecedentes policiales, se les acusa de sendos delitos de estafa, contra el derecho de los trabajadores y falsedad documental, y han sido puestos en libertad con la obligación de comparecer ante el juez cuando sean llamados a declarar. Asimismo, los policías de Burjassot continúan con las investigaciones para averiguar si hay más víctimas y para detener al tercer sospechoso, para el que han cursado una orden de búsqueda y detención.
Las investigaciones se iniciaron cuando la Policía tuvo conocimiento de la existencia de un grupo que se dedicaba a ofrecer puestos de trabajo de comerciales en una empresa creada a través de Internet, ofreciendo incluso la posibilidad de crear sus propias franquicias, para lo cual llegaban a realizar entrevistas y contratos laborales ficticios. Para ser contratados, tenían que realizar una serie de ingresos en una cuenta bancaria creada para pagar los gastos de seguros y de material.
Los agentes averiguaron que toda la actividad y documentación de la empresa era fraudulenta y que operaba en Almería, Valencia, Alicante, Murcia y Granada. Según las mismas fuentes, hay 16 víctimas de esta organización.
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