Unión por la Rioja-Partido Riojano ha vuelto a insistir en la necesidad de que la Interprofesional promueva la necesidad de firmar contratos para la compra de uva, por parte de las bodegas, para asegurar el mantenimiento del sector productor.

El presidente del Partido Riojano, Miguel González de Legarra, ha ofrecido una rueda de prensa junto al miembro del Secretariado Permanente Ángel de Jaime Baró en la que ha criticado que los viticultores llevan "cinco años" arrastrando unas pérdidas que "amenazan la supervivencia del sector productor".

Según sus datos, los viticultores están llegando a vender las uvas por debajo del precio de coste y sólo están consiguiendo "capear el temporal a base de vender los excedentes a bodegas con pocos escrúpulos". Bajo este paraguas, la temporada del 2012 amenaza con "pérdidas incluso mayores".

Así, un año más, UPR-riojanos aboga por contratos cerrados y escritos entre las bodegas y los productores que sustituyan el hecho de que éstos "están entregando la uva sin saber cuánto ni cuando van a cobrar". Contratos que, además, garanticen un precio por encima del coste de la uva.

A este último respecto Baró ha señalado cómo Agricultura publicó, hace dos años, un estudio sobre el coste de la uva que lo marcaba en sesenta céntimos el kilo. Por tanto, y "teniendo en cuenta el desfase de este estudio" el precio, a su juicio, no debería bajar de los ochenta céntimos el kilo.

Los datos de este partido apuntan a que los precios que se están vendiendo marcan los cincuenta céntimos el kilo de media; "aunque haya alguna bodega que pague más y se publique", ha apuntado Legarra.

Baró ha explicado que pueden darse "tres escenarios" con respecto a estos contratos: que los precios se fijen y sean obligatorios (lo cual ha reconocido que es imposible por normativa europea); que se llegue a un acuerdo en el sector; y que el precio sea libre pero la transacción sea por escrito y se conozca.