El partido Alternativa por Boadilla (APB), con cuatro concejales en el Ayuntamiento, ha propuesto al equipo de Gobierno de la localidad (PP), que Esperanza Aguirre tenga la primera calle en su honor después de dimitir como presidenta de la Comunidad de Madrid. No sería, sin embargo, una vía de nueva construcción, sino una de las principales de la ciudad, la que hoy en día lleva por nombre avenida del Generalísimo.

APB, segundo partido en votos de la localidad —el PSOE tiene 3 concejales y UPyD, 2— ha visto en la retirada de la presidenta el momento de salvar las reticencias del PP a acabar con la denominación franquista.

Pese a estar en contra de la gestión del PP y de las decisiones tomadas por Aguirre, la formación cree que esta es "una oportunidad excepcional" de acabar con el homenaje al dictador Francisco Franco y sustituir el nombre "por el de una persona libre y demócrata", según reza en la moción que presentarán a votación en el pleno del 28 de septiembre.

El propio Ayuntamiento se encuentra en esta calle y hace esquina con la calle de José Antonio, que homanajea al creador de la Falange Española, José Antonio Primo de Rivera.

Miguel Ángel Ruíz López, portavoz municipal, segundo teniente de alcalde y responsable de Urbanismo, Infraestructuras y Asuntos Jurídicos, ha asegurado que el PP es partidario de homenajear a Esperanza Aguirre. Sin embargo, se remitió a la consulta popular que el alcalde, Antonio González Terol, prometió para modificar la denominación, de manera que serán los vecinos quienes decidan.