Esquerra Republicana ha informado que la contestación que el Gobierno central ha realizado por escrito sobre las preguntas formuladas a raíz de las detenciones que se produjeron en Bunyola en mayo pasado "no son propias de un Estado democrático" ya que éste omite las demandas de investigación de los hechos y las respuestas son "más falsas que un duro sevillano".

En un comunicado, el presidente de la formación en Mallorca, Joan Lladó, ha afirmado que "tampoco se justifican" las declaraciones del exdelegado de Ejecutivo en las que decía que "habría un cambio de actitud de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado porque se le había acabado la paciencia".

El presidente de Esquerra también ha hecho mención a que "en la respuesta hay contradicciones como cuando se dice que se impidió el paso a la Guardia Civil que se encontraba de servicio para establecer un dispositivo de seguridad en la zona" y al mismo tiempo también se dice que "en ningún momento hubo un despliegue de seguridad en la zona".

Según Lladó "en la respuesta tampoco se dice nada del supuesto desorden público ocasionado por la portavoz de las Juventudes de ERC, Esperanza Mateu", que según señala, "ha recibido una multa de 3.000 euros por este motivo".

Para la formación, "la respuesta es inconsistente, contradictoria y más falsa que un duro sevillano: Es 'made in Spain'. Es totalmente comprensible que nadie se fíe de un Estado que miente interna y externamente".