El Ayuntamiento de Sevilla contempla el traslado del local de la Asociación de Vecinos Plaza de Armas de las Naves del Barranco, para que no suponga "menoscabo para el proyecto de concesión del recinto", que prevé el desarrollo de un mercado gourmet. Sin embargo, desde la asociación se califica de "barbaridad" esta posibilidad y asegura que no descarta movilizaciones si no se llegara a una solución.

En este sentido, el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, Maximiliano Vílchez (PP), ha respondido a una pregunta del PSOE a la Comisión de Ruegos, Preguntas e Interpelaciones sobre el uso del Husillo del Barranco, indicando que "no hay constancia" de la existencia de título jurídico a favor de esta asociación de vecinos por el que se le ceda las instalaciones. "Esto aconseja facilitar a la citada entidad otro local del entorno para que pueda seguir desarrollando con toda normalidad su actividad sin que ello suponga menoscabo para el proyecto de concesión del recinto", agrega.

Según el escrito recogido por Europa Press, Vílchez afirma que los estudios del proyecto aconsejan la integración del Husillo del Barranco en el proyecto, que se destinaría a oficinas y para actos de representación. Además, la plaza comprendida entre las Naves, el Husillo y la calle Radio Sevilla podría ser ocupada para presentaciones al aire libre, "quedando vinculado este espacio a los usos del Husillo del Barranco".

Sin embargo, la presidenta de la AAVV Plaza de Armas, Dolores Dávila, ha indicado a Europa Press que no cuentan con comunicación oficial de su traslado, pero aclara que cuenta con "todos los papeles desde que la época del PA y hemos permanecido con el gobierno anterior del PP y con el PSOE e IU", considerando una "barbaridad que nos pretendan echar". "Esperaremos a septiembre para ver cómo se desarrolla la situación, pero hay que destacar que hemos convertido el emplazamiento en un lugar de referencia para todos los vecinos de la zona", afirma Dávila, que agrega que su asociación tiene ofertados nueve talleres de unas 20 o 30 personas.

En este sentido, agrega que "la gente está acostumbrada a ir a esta zona", donde "organizamos muchas actividades culturales, montamos veladas o entregas de juguetes de los Reyes Magos, además de charlas y foros de temas como el Alzheimer". "No descartamos incluso posibles acciones con las personas que acuden a los talleres y los vecinos, ya que esta asociación está continuamente en movimiento poniendo en marcha actividades, mientras que el distrito nunca hace nada en esta zona", afirma.

"Sólo pedimos que se respete nuestro pequeño espacio en esas instalaciones porque hacemos una labor social muy grande allí", concluye Dávila.