Los Bomberos de la Generalitat han dado por extinguido este martes el incendio en una zona de cañas cercana a la playa de la Pineda en Vila-seca (Tarragona) que ha afectado a una extensión de cinco hectáreas de vegetación.

El incendio obligó este lunes a desalojar a 23 personas de un restaurante y de edificios cercanos, y amenazó a una zona de camping, varias industrias y otras instalaciones, aunque finalmente no provocó situaciones de riesgo.

Concretamente, 15 personas fueron desalojadas de un restaurante y otras ocho de un edificio, todas ellas en una calle cercana a la playa, y tuvieron que cortar dos carreteras: la TV-3146 y la TV-3148, ambas entre los kilómetros 0 y 1 en Vila-seca, según el Servei Català de Trànsit (SCT).

Este martes ambas carreteras ya se han normalizado, después de restablecer el tráfico en la TV-3146, que se mantenía cortada.

Los Bomberos también han dado por extinguido los incendios de este lunes por la tarde en Alforja (Tarragona), en el que ardieron 1,8 hectáreas de matorrales y masa forestal, y en Peracamps, en el municipio de Llobera (Lleida), donde quemaron 500 metros cuadrados de sotobosque.

La Dirección General de Protección Civil de la Generalitat ha activado este martes la prealerta del Plan especial de emergencias por incendios forestales (Infocat) en siete comarcas del centro y suroeste del país, si bien el riesgo es menor que en días precedentes gracias a las últimas lluvias.

Se trata de Anoia (Barcelona), Baix Ebre, Ribera d'Ebre, Terra Alta, Conca de Barberà, Priorat (Tarragona) y Segarra (Lleida).