La expedición de jóvenes 'Crossroads' contra el aborto ha llegado este sábado a Valladolid en su primer rally a pie por el derecho a la vida, marcha en la que participa una veintena de caminantes con edades comprendidas entre los 16 y los 30 años.

Con el lema 'Pro Life' impreso en sus camisetas, los participantes han llegado a la Plaza Mayor vallisoletana al mediodía, cinco horas después de comenzar a andar desde la cercana localidad de Tordesillas, al objeto de repartir folletos informativos sobre "la meta de su camino".

El grupo, que en su mayoría compagina sus estudios universitarios con las actividades antiabortistas, inició su "aventura" el pasado 7 de julio en Barcelona. Tras ser recibidos en ciudades como Valencia, Córdoba o Madrid, su intención es continuar "dando un paso a favor de la vida" hasta llegar a Santiago de Compostela el próximo 19 de agosto.

En la capital gallega tendrá lugar una vigilia que supondrá el final de una iniciativa reflejo del movimiento internacional que comenzó en 1995, cuando Crossroads organizó los primeros caminos provida anuales por Estados Unidos, Canadá e Irlanda.

"Desde esos países hemos recibido mucho apoyo desde que se nos ocurrió la idea durante la última Jornada Mundial de la Juventud", explica el portavoz del colectivo en España, Jaime Hernández.

Hernández ha destacado el "buen recibimiento" que ha tenido el grupo en las distintas ciudades y pueblos que ha recorrido, pero no olvida que "defender la verdad y combatir la cultura de la muerte que se inculca actualmente a la sociedad no es fácil".

En Tortosa (Zaragoza) algunos exaltados pintaron la furgoneta y emblema que acompaña a los jóvenes pro vida, mientras que en sus manifestaciones ante distintas clínicas de aborto el lanzamiento de hielos y huevos frustró sus intentos de trasladar a las pacientes de las mismas el mensaje de "apuesta por la formación del ser humano".

"Esos episodios desagradables son muy puntuales", ha expresado uno de los caminantes vallisoletanos, Pablo Santana, antes de destacar que, "en general", el colectivo ha tenido "una buena acogida" en todos sus destinos.

RESPALDO

"Algunas personas se vuelcan tanto que te ofrecen sus casas para que duermas allí o puedas ducharte", ha asegurado respaldado por sus compañeros de ciudades como Ibiza, Sevilla o Valencia.

Entre las donaciones "más curiosas" destaca la que realizó recientemente una mujer castellanoleonesa que ofreció a los chicos 17 sandías para sofocar el calor de su peregrinación. Por su parte, los Bancos de Alimentos se ocupan de facilitar la comida a los jóvenes de crossroads, que en Valladolid han recibido de la institución lo que hoy constituirá su almuerzo.

"La gente es muy generosa y se vuelca con nosotros porque sabe que viajamos con una mano delante y la otra detrás", ha opinado Santana mientras monta la mesa desde la que se recogerán firmas en la capital este fin de semana.

En total, los chicos que han caminado más de dos mil kilómetros para pedir que la reforma de la ley del aborto anunciada por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, dé paso a una "ley de aborto cero", llevan recogidas 7.000 firmas. Su objetivo, sin embargo, es llegar al millón.

Para alcanzar "una nueva regulación que proteja la vida humana y reconozca la maternidad como un bien social", Jaime Hernández apoya el "esfuerzo por erradicar la actual crisis de valores" mientras reparte trípticos informativos.

Sobre el papel los peregrinos piden también que las malformaciones del feto no se contemplen como un supuesto que permita abortar. Así se lo trasladarán en otoño al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, cuando se concentren en Madrid para hacerle entrega de las firmas recogidas.

Ciberactivismo antiabortista

Desde la caravana de Aborto Cero, los participantes mantienen una página web —www.crossroadwalk.es— en la que detallan su ruta y objetivos, testimonios de apoyo y un álbum de fotos on line que refleja los distintos momentos de la expedición.

También su twitter, '@CrossRoads_es', se hace eco de la "llamada que Juan Pablo II hizo en 1995" para construir la Cultura de la Vida y atraer al movimiento a los usuarios de las redes sociales.

"Sin duda, el ciberactivismo es nuestra mejor herramienta de difusión", ha afirmado Pablo Santana junto al Consistorio vallisoletano, donde los peregrinos confían en recibir el apoyo de las autoridades en su expedición.