Tomar una cerveza con amigos y acompañada de una tapa es uno de los pocos hábitos de consumo que resisten a la crisis este verano. En un momento en el que 9 de cada 10 ciudadanos reconocen que el consumo se ha visto afectado por la situación económica, el 68 por ciento asegura no haber prescindido de la costumbre de tomar unas cervezas.

Si bien una parte de los riojanos se han despedido de ciertos planes como ir a conciertos (69 por ciento), al teatro (59 por ciento) o salir de copas (57 por ciento) como medidas de ahorro, 6 de cada 10 encuestados admiten no haber renunciado a tomar una cerveza a pesar de la crisis. Y la mayoría (80 por ciento) siguen prefiriendo los establecimientos hosteleros antes que su casa (19 por ciento), para disfrutar de esta bebida.

A partir de los resultados de la encuesta 'El Barómetro de la crisis', elaborada por Quota Research, Cerveceros de España ha comparado la situación actual con la de 2009, cuando la crisis empezaba a afectar al consumo. En estos tres años ha aumentado el número de riojanos (24 por ciento en 2012) cuya economía ya no les permite irse de vacaciones y, por tanto, deben permanecer en su lugar de residencia.

Entre estos 'veraneantes de ciudad' el plan de quedar con amigos para tomar unas cañas ha ganado adeptos. Si en 2009 solo el 18 por ciento de los encuestados lo elegían como su plan favorito en caso de no viajar fuera, en 2012 estos ya son un 46 por ciento del total.

"Estos datos prueban el fuerte arraigo en la cultura española de la cerveza como una bebida que, consumida con moderación, nos ayuda a combatir el calor, nos permite compartir buenos momentos con amigos y familia, y para muchos constituye ya su único lujo", afirma Jacobo Olalla, director general de Cerveceros de España.

"no sin mi caña"

Con la llegada del calor el ocio cambia y así son mayoría los que creen que el teatro (98 por ciento) o ir a un concierto (98 por ciento) no son planes para el verano. En cambio, los riojanos prefieren pasar más tiempo en la calle, lo que explicaría que más de la mitad de los encuestados (58 por ciento) admiten ser tan fieles a las cañas en esta estación como durante el resto del año.

También es inmune al impacto de la crisis el idilio entre la cerveza y el aperitivo, que constituye la bebida favorita en ese momento del día para 6 de cada 10 riojanos. Lo que si ha variado es la frecuencia: mientras que hace tres años el 45 por ciento de los encuestados salían a tomar el aperitivo al menos una vez por semana, ahora mantiene esa asiduidad el 41 por ciento.

Preguntados por un aspecto relacionado con el ocio al que nunca renunciarían, salir a cenar (43 por ciento) e ir de cañas (38 por ciento) son las opciones mas valoradas, por detrás de un plan gratuito como es salir a pasear. Además, la mayoría de los riojanos (65 por ciento) cree que los españoles van a seguir yendo a los bares a tomar cañas pese a la situación económica.