La expresidenta del Consell de Mallorca y de UM, Maria Antònia Munar, ha comparecido de manera voluntaria ante la jueza de instrucción número 10, que instruye la pieza separada número 13 del caso Voltor, Carmen Abrines, para insistir en que no tiene "nada que ver con la contratación de trabajadores" por parte del Consorcio de Informática Local de Mallorca (Cilma).

Durante su comparecencia, Munar ha expresado su "extrañeza" por el hecho de que se la involucre en este caso, debido a que, según ha remarcado, su única relación con este asunto es el de haber firmado, en calidad de presidenta del Consell de Mallorca, un convenio de colaboración entre el Consell y Cilma.

"La Fiscalía considera que mi participación en este asunto reviste carácter de delito porque suscribí dos convenios, uno con Buils y otro con Flaquer y he dejado constancia de que yo jamás he firmado el convenio con Flaquer, sino que lo suscribió mi sucesora en la presidencia del Consell de Mallorca, Francina Armengol, y no ha sido llamada a declarar ni mucho menos imputada como yo lo he sido", ha recalcado Munar.

Munar ha recordado que Cilma fue creado en 1992, bajo la presidencia de Joan Verger, de forma que "todos los presidentes del Consell han firmado convenios marco con este Consorcio, al objeto de ejecutar diferentes proyectos".

En esta línea, ha apuntado que durante su presidencia se suscribieron tres proyectos (Infomallorca, Eiel y Mallorcadigital) y ha detallado que el dinero para ejecutar los proyectos "venía de cada una de las consellerías y del Ministerio de Administraciones Públicas", al tiempo que "cada proyecto tenía un conseller responsable del seguimiento: Mallorcadigital era competencia de Miquel Nadal; Infomallorca lo era de Francesc Buils; y Catalina Julve lo era de Eiel".

Además, Munar ha añadido que el Consell de Mallorca tenía un representante en el Cilma y los Ayuntamientos escogen al Consejo de Administración y estos eligen al presidente y al gerente, Eugenio Losada.

"Losada, funcionario y gerente del Cilma, era el responsable de la contratación de personal que elevaba al consejo de administración y que tras su aprobación, pasaba a la firma del presidente del Consorcio, por lo que no se puede exigir a la presidenta del Consell responsabilidad en la contratación de personal de otra institución que tiene personalidad jurídica propia y ninguna comunicación sobre el tema de personal".

Por otra parte, Munar ha querido "desmentir categóricamente" algunas informaciones "malintencionadas" que apuntan a que ella ha responsabilizado a otras personas de lo sucedido en el Cilma. En esta línea, ha remarcado que es "radicalmente falso", por lo que ha reiterado que ella no tiene "nada que ver con la contratación de personal, ni con irregularidad alguna en el Consorcio".

Por otra parte, ha anunciado su intención de emprender acciones legales contra el excontable de UM Álvaro Llompart por "falso testimonio", después de que declarara en calidad de testigo ante la sección segunda de la Audiencia Provincial que en UM se manejaba dinero negro en el año 2004.

"Tal afirmación es radicalmente falsa, se emitió ante un tribunal y se hizo sin la más mínima prueba de tales acusaciones", ha censurado la expresidenta del Parlament, quien ha recordado que cuando ella abandonó la Presidencia de UM en el año 2007, Llompart "ni siquiera estaba afiliado, por tanto mal puede conocer él lo que sucedía en UM cuatro años antes".

Finalmente, ha precisado que no se plantea acusar de falso testimonio al exvicepresidente del Consell de Mallorca Miquel Nadal, ni a los propietarios de Video U, Miquel Oliver, Luisa Almiñana, Ramón Rullán y Miguel Sard, dado que "como coimputados que son, tienen el derecho a mentir para defenderse".