La Asociación Murciana de Consumidores y Usuarios, Consumur, tras conocer el anuncio del Gobierno de la subida de IVA, se ha mostrado contraria a esta medida, por tratarse de una medida "injusta e insolidaria", considerando que aumentará el paro y el empobrecimiento de la ciudadanía.

En este sentido, pide a los ciudadanos que se revelen y manifiesten contra esta medida uniéndose a una huelga de consumo, prevista para el este jueves, 19 de julio. Esta iniciativa ha sido puesta en marcha por FACUA-Consumidores en Acción, en la cual Consumur está integrada.

La organización insta a los ciudadanos a que no realicen ninguna compra de productos ni contratación de servicios y a que reduzcan al mínimo la utilización de servicios. También pide a los empresarios que cierren sus negocios ese día.

Consumur llevará a cabo una actitud consecuente en el desarrollo diario de su actividad, así el 19 de julio, la organización no hará uso de la luz, el agua ni el teléfono.

Únicamente recibirá llamadas (dado que el servicio de línea telefónica es un servicio pagado con anterioridad a su consumo), no realizará llamadas. Así mismo se evitará la realización de trayectos y la atención al consumidor se limitará a las citas de los consumidores que hayan sido dadas con anterioridad.

Consumur ya mostró hace unos días su rechazo a la subida del IVA a través de un comunicado, considerando que la misma es "una medida recaudatoria que no sirve para estimular el empleo y que, en todo caso, a la larga, generará más paro, más empresas que tengan que cerrar y mayores beneficios para quienes salen siempre beneficiados: las grandes empresas y monopolios cuyo frontal y parapeto es la banca", según declaraciones de su presidente, Roberto Barceló Vivancos.

MANIFIESTO

La organización se suma también al manifiesto '21 motivos contra la subida del IVA', elaborado por FACUA y cuyos motivos son la subida de precios supone una bajada del poder adquisitivo de los ciudadanos, el efecto para los trabajadores será el mismo que una bajada salarial, a los pensionistas les supondrá lo mismo que un recorte en sus pensiones y a los parados les dolerá tanto como un recorte en las prestaciones por desempleo.

Es injusta e insolidaria, ya que aumentar los impuestos indirectos día más a quien menos tiene, reducirá la compra de productos y la contratación de servicios, la bajada de ventas destruirá empleos, la disminución de las ventas perjudicará a los empresarios.

Muchos turistas se verán disuadidos de elegir España como destino, provocando un durísimo golpe a un elemento clave de la economía española, la bajada del consumo tendrá un efecto negativo en las arcas del Estado, con lo que el aumento de ingresos previsto con la subida del IVA se verá reducido, minimizado, anulado o incluso podrá llegar a provocar el efecto contrario, en función de la respuesta de los consumidores.

El aumento del paro consecuencia de la bajada de ventas obligará al Estado a asumir el pago de más prestaciones por desempleo, fomentará aún más la economía sumergida, no sólo por el enorme peso del impuesto en el precio de productos y servicios, sino por la pérdida de conciencia social de empresarios, autónomos y consumidores ante un Gobierno que toma una medida que les perjudica tras aprobar una amnistía fiscal que beneficia a los grandes defraudadores.

Habrá empresas que aprovecharán la coyuntura para aumentar los precios por encima de lo que supone trasladar el incremento del impuesto, puede favorecer que determinadas empresas pacten ilegalmente cómo y cuándo repercutirán la subida para evitar competir y bajar sus márgenes de beneficios.

Muchas empresas no tendrán más remedio que asumir la subida sin trasladarla a sus precios para no perder clientes, reduciendo beneficios y capacidad de crecer y generar empleo, medidas similares aplicadas en otros países no han demostrado el efecto en las arcas públicas que anunciaban, se aprueba renunciando a subir el IRPF a las rentas más altas, se aplica después de haber aprobado una amnistí*a fiscal a los defraudadores.

Se pone en marcha sin eliminar los escandalosos beneficios fiscales de las sociedades de inversión de capital variable (sicav), la figura con la que las grandes fortunas eluden el pago de impuestos tributando sólo al 1%, se plantea en lugar de perseguir el fraude fiscal a gran escala.

El PP criticó duramente al PSOE por hacerlo en 2010 alertando de que "subir el IVA duplicaría la caída de la economía", tras lo que llegó al poder con la promesa de que no aplicaría otro incremento, por lo que hacerlo supondría un gran fraude electoral.