Los ciclistas que circulen por las aceras de Palma entre las 10.00 y las 20.00 horas serán multados desde este lunes con un mínimo de 60 euros y con un máximo de 300 euros, en virtud de la Ordenanza de la Bicicleta aprobada por el Consistorio.

Así, a partir de ahora, las bicicletas sólo podrán circular por las vías peatonales los días festivos y entre las 20.00 y las 10.00 horas, siempre y cuando no haya aglomeraciones, entendidas como situaciones donde no se puede mantener un metro de distancia con los peatones o no se pueda circular en vía recta 5 metros.

Por otra parte, el texto de la ordenanza establece que la velocidad máxima permitida en los carriles bici situados en la calzada será de 30 kilómetros por hora en lugar de los 25 kilómetros por hora que había hasta ahora.

En todo caso, las bicicletas siempre gozarán de la misma prioridad que los peatones frente a los otros vehículos cuando hagan uso de los pasos para peatones, siempre respetando la prioridad de los mismos, y atravesándolos por sus extremos laterales.

En virtud de esta ordenanza municipal, la Policía Local podrá retirar una bicicleta cuando esté más de 48 horas sujeta a un elemento de mobiliario urbano.

Durante las últimas semanas, agentes de la Policía Local han ido informando a los ciclistas que circulaban por las aceras de la prohibición de hacerlo, si bien hasta ahora no habían interpuesto ninguna multa, algo que harán a partir de este lunes.

EXCEPCIONES

Pese a la citada Ordenanza, el Ayuntamiento Palma autorizará, mediante un decreto de alcaldía firmado el pasado 14 de junio, el paso de las bicicletas por las zonas peatonales y aceras de las calles colindantes con el carril bici de la capital balear.

En concreto, podrán pasar por el tramo de calle peatonal de Fábrica, la zona del paseo elevado de la avenida Antoni Maura, la acera del tramo de la avenida Joan Miró comprendido entre la autopista de Ponent y Marivent, -junto a los números impares-, la calle peatonal del Convento de San Francisco, y el Parc de la Mar.

Además, estará autorizado el paso por el tramo de la acera de la Avenida Conde de Sallent, comprendida entre la calle Blanquerna y la calle 31 de Diciembre, el tramo entre la calle San Miguel y el paso para peatones en el lado de los números impares, así como la calzada estrecha del paseo del Born, el parque de Sa Riera, y el tramo de la plaza de España, desde el paso de ciclistas hasta el vial de acceso al Olivar.

Así, algunas de las autorizaciones que contempla este decreto coinciden con peticiones que realizó la asociación Palma en Bici, durante la reunión que Movilidad mantuvo con representantes de este colectivo el pasado 15 de junio. Además, se recogen sugerencias que se habían recibido previamente desde la Policía Local y de los propios técnicos municipales de este área.

El Consistorio precisó que "con el criterio de racionalizar al máximo el uso de la bicicleta, se trata en algunos casos de permitir el paso en las conexiones entre carriles bici, (la Avenida Conde de Sallent entre la calle Blanquerna y 31 de Diciembre), grandes espacios como el Parc de la Mar o por cuestiones de seguridad, como la acera de Joan Miró en la zona de Marivent".

Estas autorizaciones, que serán válidas de 00.00 a 24.00 horas, suponen exenciones a la Ordenanza Municipal Reguladora de la Movilidad de los Ciclistas, aprobada en el Pleno del Ayuntamiento el pasado 26 de abril, que dispone los artículos 11 y 12 la prohibición de circular en bicicleta por las aceras y zonas peatonales.

El decreto entrará en vigor a lo largo del mes de julio, y las zonas autorizadas se señalizarán mediante la placa "Espacio compartido bici-peatonal".

Cabe recordar que, de acuerdo a lo establecido en los artículos 11.2 y 11.4 de la Ordenanza Municipal Reguladora de la Movilidad de los Ciclistas, la velocidad máxima permitida será de 10 km/h.