La Subdelegación del Gobierno en Segovia ha advertido de nuevo, y ante la inminente llegada del verano, que el embalse del Pontón Alto, ubicado entre la capital y el Real Sitio de San Ildefonso, no es apto para el baño y ha pedido prudencia a los ciudadanos para evitar trágicos sucesos como los que se han repetido en años anteriores.

Desde la puesta en funcionamiento del Pontón, en 1993, cinco personas han perdido la vida ahogadas en sus aguas. La última víctima fue un joven dominicano, que murió el 17 de julio del pasado año, un hecho que suscitó la polémica sobre la necesidad de prohibir el baño.

Sin embargo, la ley establece que todos pueden usar las aguas superficiales para beber y bañarse, de manera que existe libertad para el baño en este embalse aunque la zona no sea declarada para este uso y sólo puede restringirse por razones de salud o peligro demostrado. En la actualidad sí está prohibido zambullirse en el área de las compuertas, en un espacio de 200 metros, que se encuentra limitado por una baliza.

Por ello, la subdelegada del Gobierno, Pilar Sanz, ha querido insistir en la advertencia de la peligrosidad de las aguas de este embalse, de gran profundidad y turbidez. Según ha incidido, existen corrientes, entre las orillas hay grandes distancias y en el fondo hay rocas y piedras que no se pueden ver desde la superficie. Además, ha alertado de que si una persona sufre una incidencia en el embalse, hay dificultades para llegar hasta donde esté para auxiliarle.

La representante estatal, según ha informado en un comunicado, ha mantenido contactos en las últimas semanas con la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), que ha instalado carteles en las inmediaciones del embalse para recordar los riesgos que conlleva el baño. En el entorno se han colocado carteles con el texto '¡Atención!. Se aconseja no bañarse en el embalse. Aguas muy peligrosas'.