La portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Begoña García Retegui, y la diputada Teresa Rosique (PSOE) han valorado la actualidad de la política social del PP a raíz de la publicación del último dictamen del Consejo Económico y Social de la Región de Murcia (CES), al que Retegui ha calificado "como uno de los más duros de toda su historia", ya que concluye que "hay trato discriminatorio a los dependientes de Murcia", y que éstos "tendrán que pagar más por los servicios y van a recibir menos ayudas de la Comunidad y del Gobierno de Rajoy".

"Lo que nos quieren decir es que están desmontando los servicios sociales", así que "vamos a intentar parar todo esto antes de que llegue como proyecto de Ley a la Asamblea", ha dicho en rueda de prensa.

Retegui ha indicado que "una ley de Acompañamiento que entrará próximamente en la Asamblea Regional contempla, según las palabras del CES, un desproporcionado impacto en los dependientes más necesitados y sus familias, un retroceso en el nivel de protección de la ley de dependencia, con un incremento de pago, copago y repago, que perjudicará a fundamentalmente a las rentas más bajas".

Aludiendo al pasado Debate sobre el Estado de la Región, ha dicho que "el Partido Popular se erigió como garante del Estado del Bienestar", mientras que ahora "da una nueva vuelta de tuerca, con una forma de desangrar el bolsillo de los dependientes y el de sus familias".

La portavoz socialista ha indicado que "las normas del PP y los proyectos que presenta dejan en evidencia las mentiras de Valcárcel", a lo que ha añadido que "mientras que los bancos se vayan de rositas, no es posible que se reduzcan las prestaciones".

Todo esto viene motivado por el último dictamen del CIS, y por el plan de reequilibrio financiero que contempla "nuevas tasas" y que "puede devenir en anticonstitucional".

"No comprendemos que el presidente Valcárcel no explicara estas medidas en el Debate", ha continuado Retegui, pero "los ciudadanos van a comprobar de qué manera defiende el Estado del Bienestar, con copago, metiendo la mano en el bolsillo de personas en situación de dependencia".

Retegui ha finalizado diciendo que presentarán "enmiendas y alternativas, pues hay que cumplir los objetivos de déficit, pero si hay voluntad política, se pueden conseguir los 15,9 millones que hacen falta por otras vías, sin tocar el bolsillo de los dependientes bolsillo, y sí quitando beneficios fiscales a las rentas más altas".

Derechos adquiridos

Por su parte, la diputada Teresa Rosique ha pormenorizado los datos del dictamen del CES, donde ha dicho que la Ley de Dependencia "la aprobó una Gobierno Socialista, y ahora no saben cómo quitársela de encima", y que "se trata de derechos adquiridos".

Rosique ha indicado que existen "700.000 personas en situación de dependencia", para las que va a suponer "un auténtico hachazo a las prestaciones por dependencia".

Respecto a los datos, Rosique ha dicho que, por ejemplo, "quien ocupaba una plaza de residencia, antes se garantizaba que como mínimo había que reservar un dinero, el 10%, para sus gastos personales: unos 120 euros, y que ahora, quienes están por debajo del precio de referencia para una plaza de residencia, ya no tendrán 120, sino sólo 90 euros".

O que "el PSOE no está dispuesto a que personas con grado 2 ó 3, que están en centros de día, y que necesitan atención cuando salen de allí, vean recortadas sus prestaciones", pues "antes la familia contaba con el 25% de las ayudas en el entorno familiar, y ahora se elimina y se hace incompatible", lo que supondrá "un perjuicio enorme para personas con un grado de discapacidad alto". Y ha concluido que para "los mayores que van a un centro de día, habrá una rebaja de 100 euros por persona".