El portavoz del Grupo Socialista en el Parlamento andaluz, Mario Jiménez, ha pedido este sábado "transparencia" al Gobierno de España en el caso de que la Unión Europea (UE) rescate a la banca española, al tiempo que ha recordado que hay "una líneas rojas" que no deben traspasarse, como el sistema de sanidad, educación o pensiones.

En declaraciones a los periodistas en Mazagón, núcleo costero ubicado en la provincia de Huelva, Jiménez ha abogado por llevar a cabo un gran pacto político, en el que estén presentes como mínimo el PP, PSOE e IU, para conocer las condiciones de esta posible actuación.

En esta línea, el socialista ha señalado que la posibilidad de que se realice este rescate por parte de las instituciones europeas conllevaría "garantizar la solvencia y sostenibilidad del sector financiero del país", al tiempo que ha recordado que este hecho se llevaría a cabo después de la "mala gestión" en Bankia, con la que "ha quedado en evidencia la capacidad de este Gobierno para atravesar una situación tan complicada como la que estamos viviendo; ha sido una gestión verdaderamente mala y quizá por las implicaciones directas del PP a través de la figura directa de Rodrigo Rato", ha agregado.

A su juicio, "esto ha generado un estado de cosas, que va a producir con toda seguridad una intervención por parte de las instituciones europeas que tiene todo el sentido, si se hace bien, ya que España forma parte de Europa y ha contribuido a su construcción".

Por ello, el portavoz socialista considera que "ha llegado el momento de que las instituciones europeas respondan con solidaridad y responsabilidad y garanticen también la sostenibilidad de ese elemento fundamental que es el sector financiero y que tiene que estar en las mejores condiciones posibles".

De este modo, ha dejado claro que el PSOE "respalda" las gestiones que el Gobierno central "vaya a hacer ante las instituciones financieras" al objeto de conseguir "un buen fin" de la situación actual, aunque ha precisado que "hay que marcar algunas cosas que son fundamentales".

En este sentido, Jiménez ha hecho hincapié en que esta actuación tiene que ser también conocida por el conjunto de las fuerzas políticas en el Congreso de los Diputados y, por tanto, el Ejecutivo tiene que actuar "con transparencia", al contrario "de lo que ha hecho hasta ahora con el caso de Bankia y otras entidades financieras".

En opinión del portavoz socialista, el Gobierno del PP debe "compartir las decisiones de manera responsable al menos con el PSOE e IU, como las tres grandes fuerzas políticas que tienen presencia en el Congreso de los Diputados y que son capaces de hablar en nombre del conjunto de los ciudadanos de este país".

De la misma manera considera que "tiene que formarse en una mesa del diálogo para que mediante un pacto de Estado, en el que estén como mínimo PSOE, PP e IU, se establezcan las condiciones en las que se pueda producir esa actuación del Eurogrupo y del Banco Central Europeo en el sistema financiero de nuestro país" al objeto de que "las consecuencias que eso pueda tener o las exigencias que la Unión Europea puedan plantearle a España sean perfectamente conocidas y pactadas".

"líneas rojas"

Por su parte, Jiménez ha subrayado que para su formación hay "unas líneas rojas" que quieren que en la negociación con el Eurogrupo y el Banco Central EuropeoCE estén "establecidas". "No vamos a aceptar ninguna cuestión que en términos de condiciones que signifique tocar la salud, la educación, el sistema de pensiones, así como tampoco vamos a aceptar que se establezcan condiciones que supongan tocar el sistema de cobertura de desempleo", según ha enfatizado el portavoz socialista.

Por último, ha pedido al Gobierno que establezca una mesa de diálogo con las distintas fuerzas políticas a este respecto, y que desde el punto de vista institucional "se siente con las comunidades autónomas y los agentes sociales y económicos para que la hoja de ruta esté perfectamente marcada si finalmente se produce esa actuación del Eurogrupo o el Banco Central Europea para no generar ninguna situación que después no se pueda entender".

"Tenemos toda la responsabilidad del mundo de cara a este momento, pero también toda la responsabilidad en la defensa del Estado de Bienestar y el modelo social que está en nuestra Constitución y que no vamos a comprometer por ninguna actuación que se plantee por parte de las instituciones europeas", ha concluido.