Fuentes de la Casa Imperial japonesa indicaron que tanto la madre como el bebé se encuentran bien de salud, citó la agencia de noticias Kyodo. El pequeño príncipe, que nació ayer, es el primer hijo varón de la princesa Kiko y su esposo, el príncipe Akishino, segundo vástago del emperador de Japón, Akihito. Kiko y Akishino tienen otras dos hijas, Mako, de 14 años, y Kako, de 11 años. El niño pesó dos kilos y 558 gramos al nacer, y mide 48,8 centímetros; se espera que abandone el hospital junto a su madre en unos diez días. Este es el primer varón que nace en el seno de la familia imperial en casi 41 años y, debido a la patrilineal Ley de Sucesión al Trono, se convierte en tercero para suceder a su abuelo Akihito, de 71 años, tras su tío, el príncipe heredero Naruhito, de 46 años, y su padre Akishino, de 40. La Casa Imperial ya ha contratado a una enfermera joven, pues no llega a la treintena, para que se ocupe del principito, indicaron fuentes de esa institución. Además, dedicará al niño un presupuesto especial de algo más de tres millones de yenes anuales, unos 25.600 dólares o 20.000 euros.