Y lo consiguió, incluso salió a pasear varias veces con su secuestrador, Wolfgang Priklopil, un ingeniero de 44 años que se suicidó tras la huida de Natascha. «Hacía señales de socorro con la mirada a la gente con la que me cruzaba. Una vez, me presentó a un amigo, pero no quise decir nada por si nos mataba a los dos».

La oportunidad la tuvo hace dos semanas, mientras lavaba el coche de Wolfgang. Un descuido y huyó hasta la casa del vecino. «Fueron 10 ó 12 minutos, toda una eternidad». La pesadilla, tras ocho largos años, por fin había terminado.

Mucha desesperación

Natascha utiliza varias veces durante la entrevista, de 20 minutos, el término desesperación. «Tuve pensamientos malos. A veces soñé con decapitarlo si hubiese tenido un hacha».

Natascha se ha negado en todo momento a hablar sobre sus relaciones íntimas con Wolfgang. La Policía, no obstante, ha asegurado que ha mantenido «contactos sexuales» con él, sin especificar si fueron obligados o consentidos. Los psiquiatras que han hablado con ella la han descrito como una joven dulce e inteligente, «con un talento intelectual sorprendente», a quien le gusta leer, escribir, pintar y charlar.

La joven fue secuestrada  la mañana del 2 de marzo de 1998 cuando se dirigía al colegio. Tenía sólo diez años.

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Su huida

«La vecina a la que pedí ayuda estaba tan sorprendida que no reaccionaba, no me dejó entrar en su casa, sólo le preocupaba que no pisara el césped. Por fin llamó a la Policía.

Les conté todo a los dos agentes que llegaron. Estaban desconcertados».

El futuro

«Quiero ser periodista, abogada o psicóloga y llevar adelante un proyecto para mujeres en México que son raptadas, torturadas brutalmente y violadas. Quiero ayudar para que esto no pase nunca más».

Para ella, sólo es un criminal

Así fue la entrevista. Estrella mediática

Ganará 600.000 dólares. Natascha se ha convertido en toda una estrella mediática. Más de 80 televisiones de medio mundo han expresado su intención de comprar los derechos sobre la entrevista (en España, Antena 3 la ofrece hoy a las 22.00 horas). En su cita de ayer en la cadena austriaca, la joven apareció algo delgada. De hecho, sólo pesa 42 kilos. Vestía camisa morada, vaqueros y un pañuelo que le cubría la cabeza, pero que no ocultaba su cabello rubio y sus ojos azules, que, según los médicos, son muy sensibles a la luz. En todo momento se mostró muy serena, alternando algunas risas con breves sollozos. Natascha ha recibido más de 400 peticiones de entrevista de todo tipo de medios escritos y audiovisuales, aunque de momento sólo ha concedido tres:  al diario Kronenzeitung, al semanario News y a la televisión pública ORF. Esta última asegura que no ha pagado dinero a la muchacha, aunque sí va a cederle el derivado de la venta de esos derechos, unos 600.000 dólares.