El Pleno del Ayuntamiento de Santander ha aprobado, con los votos del equipo de Gobierno (PP) y la abstención del PRC, la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), junto con su nuevo Informe de Sostenibilidad Ambiental, que sin embargo han sido rechazados por el Grupo Municipal Socialista, pese a los reiterados llamamientos a la "responsabilidad" de apoyarlo que ha realizado el alcalde, Íñigo de la Serna, quien ha recordado que el documento es "demandado por toda la sociedad" y es el de "mayor consenso y respaldo social" de España.

Así, el regidor ha asegurado que se trata de un plan "imprescindible" para el progreso y modernización no sólo de Santander sino de toda Cantabria y la "mejor herramienta" para impulsar la actividad económica en esta coyuntura de crisis puesto que "va a garantizar" la competitividad de la ciudad.

Sin embargo, la concejala socialista Judith Pérez, ha opinado que el PGOU no hará de Santander una ciudad "equilibrada y de futuro" porque su redacción parte de "cimientos equivocados" que, con la evolución que se ha producido, demuestran el "error" del planteamiento inicial basado en el agotamiento del suelo y en un crecimiento inmobiliario "especulativo".

Además, ha criticado que es un plan "recaudatorio", en el que no se ha variado el modelo "desarrollista" que planteaba en sus inicios y que crisis hará demorarse "de manera definitiva", por lo que "dentro de 12 años" será necesario elaborar un nuevo plan sin que se haya desarrollado el presente.

Por su parte, el portavoz del Grupo Regionalista, José María Fuentes Pila, ha preguntado si las prioridades que se establecían en diciembre (desde La Remonta al incremento del suelo productivo) siguen siendo vigentes, y ha criticado que algunas de las infraestructuras "más poderosas" de la ciudad han quedado "encarceladas" en la aprobación del PGOU.

Con todo, su "preocupación" es que el Plan General vaya a ser "dictado" por el Gobierno de Cantabria y no por el Ayuntamiento, un planteamiento en el que ha incidido a lo largo del todo el Pleno, que se ha prolongado por más de tres horas. "Parece que el Gobierno no tiene muy claro si quiere que el plan sea redactado por Santander o si quiere que sea su plan", ha planteado, insistiendo en que sería "preocupante" para el futuro desarrollo de Santander que el PGOU fuera "dictado" por el Ejecutivo regional.