El gran parque sobre el soterramiento del ferrocarril transformará "radicalmente" un total de 25.300 metros cuadrados en el centro de Logroño "que estarán para el mes de agosto o septiembre en su máxima plenitud".

Así lo ha asegurado este miércoles la alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, ha visitado esta mañana la zona en la que se ubicará el parque vinculado al proyecto del soterramiento, sobre y junto al edificio de la estación.

En el recorrido, la primera edil ha estado acompañada por el arquitecto Iñaki Ábalos y la paisajista Teresa Galí-Izard, autores del diseño de este gran espacio verde junto a la también arquitecta Renata Sentkievicz.

La superficie total sobre la que se actuará es de 25.300 metros cuadrados, de la que 10.500 metros cuadrados corresponderán a zonas con riego y 14.800 a zonas pavimentadas. Tal como la han definido los responsables de la propuesta, consiste en crear "un espacio público de carácter urbano y paisajístico". Atendiendo a ambos criterios, se diseñan los dos grandes ámbitos de la actuación.

Así, el proyecto parte de la premisa de adaptarse a las diferentes circunstancias de partida de la parcela. La zona Este, una gran área plana en donde destacan los lucernarios que iluminan la zona de andenes; y por otra parte, sobre la estación soterrada, en donde "la topografía y más concretamente la triangulación del forjado que la cubre" adquiere gran importancia para definir la intervención.

Tal como ha destacado la alcaldesa durante el recorrido, "una vez acabada la obra de infraestructura ferroviaria, está en marcha la obra más importante para conseguir ese sueño de los logroñeses". Así, "Logroño va a contar en poco tiempo con un gran parque urbano que transforma de manera radical esta parte de la ciudad, ocupada durante décadas y hasta hace muy poco tiempo por las vías del tren".

"Un pulmón verde en el centro que actúa como el elemento de conexión de los parques que forman el anillo verde de la ciudad. Un parque de carácter lineal con posible continuidad que se convierte en espacio de recreo para los logroñeses que residen en esta zona y que también repercute con intensidad en el sistema general de parques de Logroño", ha afirmado.

Respecto al proyecto de Ábalos y Galí-Izad, la alcaldesa ha destacado "la belleza de la gran colina sobre la cubierta de la estación, un mirador de excepción que va a cambiar nuestra manera de contemplar la ciudad, viéndola desde dentro en lugar de hacerlo desde fuera como estábamos acostumbrados hasta el momento".

En el diseño ha destacado la combinación de especies que van a otorgar a este espacio y al parque que lo continúa "una variada gama de colores y tonalidades cambiante a lo largo del año". El coste del ajardinamiento, como ha detallado la primera edil, ascenderá a 500.000 euros.

VEGETACIÓN,

Riego y recorridos.

"Logroño -en palabras de la paisajista Galí-Izard- ha tenido la inteligencia de guardar recursos para un gran parque urbano en el centro de la ciudad, que es algo insólito, es el único parque de estas características que se está construyendo en España y en Europa". Un nuevo paisaje, ha afirmado, "adaptado a los usos y condiciones de la ciudad".

Así, para definir y ordenar el diseño, según han destacado sus responsables, han sido fundamentales el sistema de riego "sobre la base de un riego sostenible" y la disposición de recorridos, en lo que se ha ido aprovechando la topografía "para conseguir pendientes fácilmente practicables".

En cuanto al riego, se distingue dos soluciones. Por una parte, la utilización de aspersores para las grandes campas verdes fundamentalmente en las zonas planas; por otro, el sistema de goteo que riega los límites de las praderas con las zonas peatonales y las que se adaptan a la geometría de los lucernarios y la zona triangulada de la cubierta.

Respecto a la vegetación, condicionada por el riego y la topografía, se contemplan especies tapizantes para las campas planas y césped en las zonas de aspersores. Junto a los lucernarios se plantarán gramíneas. Será en la colina donde se ubicará mayor diversidad de especies arbustivas.

En cuanto al arbolado, se prevé la plantación de plátanos y robinias en los laterales de las grandes campas. En las praderas en pendiente, las coníferas establecerán el límite de la zona verde. "Se trata de hacer grandes contrastes, como los que tiene el clima de Logroño, por lo que se usará mucho amarillo en verano y verde en otoño y primavera", ha detallado Teresa Galí-Izard.

ADAPTACIÓN.

El pavimento se ha seleccionado teniendo en cuenta los usos y recorridos, buscando facilitar la accesibilidad y conseguir que sea lo más permeable posible. Por ello, se ha escogido un pavimento granular continuo, estabilizado con un material que permite un tránsito peatonal con comodidad. Las zonas de juegos infantiles también contarán con un pavimento específico.

La iluminación tendrá grados de intensidad bien definidos, buscando minimizar la contaminación lumínica pero incrementando la intensidad en las zonas más transitadas. Se instalarán, entre otros tipos de elementos, luminarias solares y balizas empotradas en el pavimento.

El parque estará plenamente acondicionado para diferentes usos. Como ha ido describiendo la paisajista, habrá zonas para que puedan jugar los niños, otras para la realización de eventos o rincones más recogidos; espacios soleados y otros más sombríos. Estará adaptado "a la forma de vivir de la gente de aquí".