El PSM-IV-ExM ha reclamado hoy al Govern balear que no cree "escenas ridículas" dentro de las aulas de los colegios de Baleares separando a los alumnos más pequeños en función de la lengua vehicular de la enseñanza, fomentando de esta forma "situaciones tensas, raras y que se las tengan que explicar en su casa".

De este modo se ha pronunciado el diputado de la coalición nacionalista ante un proceso en el que alrededor de 50.000 niños de entre tres y siete años han tenido la posibilidad de escoger la primera lengua de su enseñanza durante el próximo curso escolar, y que de acuerdo con las primeras estimaciones realizada por el Govern el porcentaje de petición del castellano rondaría el 15 por ciento.

Pese a que todavía no se conocen con concreción los datos de alumnos que se elegido estudiar en catalán o en castellano, Alorda se ha referido a la "mayoría silenciosa" que se ha pronunciado a favor de que la lengua catalana "como fórmula para conseguir la capacitación en las dos lenguas oficiales y con una tercera lengua extranjera".

"La ciudadanía ha entendido el sentido de la lengua propia, que es la manera de reforzarla y que no es una decisión excluyente sino más bien al contrario", ha agregado el diputado al respecto.

Asimismo, Alorda ha criticado que, en un momento que el Ejecutivo balear "retira personal de apoyo de las aulas para los alumnos que lo necesitan", se ponga en marcha una iniciativa -la libre elección de lengua- que es "contraproducente, tal como está diciendo toda la comunidad educativa, algo que nos parece realmente preocupante".

Con todo, le ha pedido al Govern que "haga una reflexión sobre este tema", al tiempo que "ha vuelto a felicitarse por esa mayoría silenciosa que ha tenido mucho más sentido común, amor por el país y por la lengua propia y por la cohesión y la tranquilidad ciudadana y respeto por la comunidad educativa, al contrario de lo que hace el Govern, que es buscar la provocación y hacer ruido, que es un grave error sobre todo cuando hablamos de niños tan pequeños", ha opinado.

El bajo porcentaje de alumnos que quieren estudiar en castellano y que va a provocar, según Alorda, "que los alumnos que estudian en castellano sean tratados como la minoría china o de Chequia", unas palabras del propio conseller de Educación, Rafael Bosch, "que son muy gráficas y también desafortunadas de lo que está provocando el propio Govern, ha apostillado.