Médicos generales y de familia reunidos en Santander han llevado a cabo una protesta contra los "recortes sanitarios" y la "expropiación de derechos" que sufre parte de este colectivo, al tiempo que han reivindicado que "la Medicina es humanista, no mercantil".

Este acto de protesta ha culminado la Mesa Profesional sobre la Atención Primaria celebrada en el XIX Congreso Nacional y XIII Internacional de Medicina General y de Familia que tiene lugar estos días en la capital cántabra.

Según ha denunciado en un comunicado la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia, la aprobación del decreto de medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud "culmina las restricciones que viene sufriendo el sistema sanitario, en especial la Atención Primaria".

Así, advierte que de llevarse a cabo algunas medidas, supondrá "cambiar a un modelo de sistema sanitario en el que la asistencia ya no es un derecho del ciudadano, sino del asegurado o beneficiario'". Además, "ni generarán un ahorro real, ni mejorarán la calidad del sistema".

Los médicos participantes en la protesta portaban una pancarta contra uno de los puntos de este decreto que supone, señalan, "la expropiación de derechos para una parte de profesionales del colectivo sanitario", lo que se suma a su rechazo a los "recortes reiterados" que sufre el sistema sanitario, en especial la Atención Primaria, según el doctor Francisco José Sáez, uno de los coordinadores del Grupo de Gestión de la SEMG.

En su intervención en la mesa de debate, Sáez ha denunciado también el "menoscabo" que la Atención Primaria viene sufriendo "desde hace tiempo". Según los datos que maneja la SEMG, todas las Comunidades Autónomas han realizado "reajustes" de jornada de los profesionales médicos del primer nivel asistencial, "recortes" en los sistemas de guardias y "despidos" de interinos, entre otras medidas.

"Los médicos del primer nivel asistencial llevamos años, muchos, reivindicando la necesidad de una Atención Primaria fuerte, precisamente para garantizar no solo la sostenibilidad del sistema sino ineludiblemente la calidad y equidad de su asistencia", ha destacado Sáez.

Para la SEMG, que el derecho a asistencia sanitaria "se limite" tan solo al ciudadano que esté asegurado o sea beneficiario "es un grave error", y "no solo por la inequidad e injusticia" que supone, ha señalado el doctor Fernando Pérez Escanilla, responsable del Área de Salud Pública de esta sociedad científica.

A su juicio, el hecho de que tan solo el asegurado pueda recibir asistencia supone que la labor preventiva que se desarrolla desde el primer nivel asistencial "puede verse afectada". Pérez Escanilla alerta "no solo de la injusticia que conlleva dejar sin asistencia continuada a una parte de la población, sino del peligro que puede suponer para la salud pública, aunque la patología aguda pueda ser atendida en urgencias".

Asimismo, ha manifestado el rechazo de la Sociedad de Médicos Generales a la "estaturización forzosa" de profesionales sanitarios, que considera "un error grave e incomprensible". "No solo porque supone una expropiación de derechos que estos compañeros han adquirido a lo largo de más de un cuarto de siglo de ejercicio profesional y por la inseguridad jurídica que les genera, sino también porque la viabilidad de su aplicación plantea muchas dudas y su supuesto beneficio es una incertidumbre".

Esta medida, que se estima que afectaría a unos 7.000 médicos (además de a otros profesionales sanitarios), "deja en el aire", según la SEMG, "quién se hará cargo de la asistencia de las personas a las que atienden si los profesionales renuncian a este cambio forzado, ya que en este caso se verían obligados a desempeñar labores administrativas fuera del ámbito sanitario".

"¿Renunciamos a la experiencia acumulada de estos profesionales médicos cualificados? ¿Qué labores administrativas se les adjudicarán? ¿quién se hará cargo de sus pacientes? ¿Habrá que contratar más médicos o se ampliarán los cupos masificando más las consultas?", se pregunta.