"Celebro que estemos cumpliendo con el calendario previsto", señaló el alcalde después de visitar la ejecución del tramo norte del túnel, acompañado por la concejala de Urbanismo, Pilar Martínez.

Gallardón sostuvo que la nueva infraestructura, formada por dos túneles unidireccionales de 3,5 metros de ancho, mejorará la circulación y permitirá la comunicación entre los sectores de Mirasierra, Montecarmelo y Arroyo Fresno con el barrio del Pilar, actualmente separados por la avenida Cardenal Herrera Oria.

La obra, de 3,5 kilómetros de longitud, beneficiará a la movilidad de unas 100.000 personas (41.000 vecinos del norte y 51.000 del sur), que además dispondrán de un itinerario alternativo para poder acceder a la M-40.

30.000 vehículos a diario

Según Gallardón, está previsto que por este nuevo eje circulen a diario unos de 30.000 vehículos y que sus usuarios "ahorren más de 350.000 horas de viaje anuales, gracias a recorridos más cortos y a la mejora del tráfico".

El presupuesto para la construcción del túnel y las rampas de acceso es de 73,6 millones de euros y hasta el momento se ha realizado el 85% del vaciado del tramo en subterráneo, el 14% de la excavación en mina, y se han instalado todos los pilotes de la estructura.

"Una vez concluido el proyecto", destacó Ruiz-Gallardón, "el patrimonio verde aumentará respecto a los 667 árboles trasladados por las obras" y añadió que mejorará el entorno con la instalación de bancos, juegos infantiles y una pista de petanca.

Por último, el alcalde manifestó que "hemos hecho un gran esfuerzo estos cuatro años para que Madrid cumpla su papel de referencia en Europa y para que la siguiente legislatura y la siguiente no tengan necesidad de efectuar trabajos de infraestructura".