El presidente de Extremadura, José Antonio Monago, se ha mostrado convencido de que en el año 2013 la comunidad extremeña entrará en "senda de recuperación", de modo que se detendrá la recesión y comenzará el "crecimiento positivo de la economía".

"No me cabe ninguna duda de que 2013 será un año de recuperación, lo digo honestamente con los datos que tengo", ha aseverado Monago en el transcurso de una entrevista concedida a Europa Press.

El dirigente autonómico ha explicado que para que en 2013 se produzca la recuperación ha sido preciso librar una "lucha sin cuartel para equilibrar las cuentas públicas" desde "el minuto cero" en que pudo formar gobierno tras los resultados que se produjeron en las elecciones del 22 de mayo de 2011, de las que hoy martes se cumple justo un año.

"No es posible albergar posibilidad de recuperación si uno no puede equilibrar las cuentas", ha insistido Monago, quien ha recordado que en julio pasado el déficit autonómico era del 6,8%, que su gobierno pudo reducir a un 4,59% a final de año, a pesar de que se encontró con que, por ejemplo, "no se había presupuestado el último trimestre la Seguridad Social de los empleados públicos". Además, Monago ha insistido en que según la evolución del primer trimestre de 2012, el déficit disminuirá con seguridad hasta el obligatorio 1,5% para finales del presente ejercicio.

"pequeñas luces"

"Sin lanzar las campanas al vuelo creo que honestamente hemos hecho lo que teníamos que hacer" en el primer año tras las elecciones, ha sentenciado Monago, quien ha destacado la labor que se ha seguido en áreas como comercio exterior; captación de inversiones; o presentación de Extremadura como una "tierra de oportunidades".

Por tal motivo, el presidente autonómico ha pedido que "nadie tenga duda de que Extremadura tiene solución" porque "se van viendo pequeñas luces" que indican que el año que viene se tendrá ya "crecimiento positivo".

Se ha referido así, por ejemplo, al crecimiento de las exportaciones, que supera en más del triple a la media nacional; el desarrollo del sector turístico, el segundo que más crece de España en visitantes tras el País Vasco; o las inversiones foráneas que recibe la región, tanto el campo de las renovables como de la minería; o incluso los proyectos agrarios como los regadíos en Tierra de Barros con el apoyo de Caja Almendralejo o las plantaciones de castaños en el norte de Cáceres que generarán numerosos puestos de trabajo.