El vicesecretario de Organización y Electoral del PP, Carlos Floriano, ha culpado al PSOE de la actual situación de España, ya que, según ha subrayado, el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero tenía "obligación de controlar el déficit del resto de administraciones públicas" y no lo hizo. A su juicio, ha habido "una dejación de funciones absolutamente irresponsable".

"Vamos a hablar de la herencia porque esto condiciona muchas de las reformas que estamos llevando a cabo", ha declarado Floriano en una rueda de prensa en la sede nacional del PP, al término de la reunión de la secretaria general de la formación, María Dolores de Cospedal, con los vicesecretarios generales y los portavoces parlamentarios en el Congreso y el Senado.

El dirigente del PP ha subrayado que si el Gobierno socialista hubiera hecho en su momento las reformas necesarias, ahora no habría que acometer reformas de tanta "profundidad" como las que se está viendo obligado a realizar el Ejecutivo de Mariano Rajoy. "El Gobierno del PP está haciendo lo que no hizo el PSOE, con una dejación de funciones absoluta, o corrigiendo lo que hizo mal", ha recalcado.

En este sentido, se ha quejado de que los Gobiernos del PSOE no se ocuparan del déficit de las administraciones públicas, de forma que se cerró 2011 gastando 90.000 millones más de lo que se ingresa. A su entender, el gabinete de Zapatero actuó con "dejación" por no controlar el déficit de las autonomías.

RUBALCABA,

"denominador común"

Según Floriano, las etapas de gobierno del PSOE "suelen terminar igual": en 1996 "con una quiebra que obligó al PP a pedir un crédito para pagar las pensiones" y ahora en 2011 "con deudas por todos lados". En su opinión, el "denominador común" de ambas etapas es el actual secretario general de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba. "Es el denominador común de una misma situación: mucho paro, mucha deuda y muchos deficits que deben pagar los gobiernos del PP", ha afirmado.

A renglón seguido, ha criticado la "falta de consolidación" de Rubalcaba como líder de la oposición, algo que, a su entender, queda reflejado en la última encuesta del CIS -donde el PP saca 11 puntos de ventaja al PSOE—. "Muestra cómo el PSOE no es que no se consolide como alternativa, es que ni siquiera se consolida como una oposición razonable", ha apostillado.

Además, ha dicho que los resultados de los congresos regionales socialistas muestran su "inconsistencia interna", con la exministra Carme Chacón "ganando prácticamente desde su casa" con sus candidatos y Rubalcaba "esforzándose por sacar otros líderes que perdían" los congresos, algo que ha enmarcado en la "forma de oposición" que está alentando: la de "situarse detrás de cualquier movimiento o algarada contra el Gobierno". En su opinión, el líder socialista hace una oposición "de militante" y no de buscar el interés general.