El presidente de la Asociación en Defensa de la Sanidad Pública de la Región de Murcia, Juan Antonio Sánchez, explica que el sistema futuro de la sanidad murciana "no está definido", pero cree que avanza hacia un modelo similar al anunciado en la Comunidad Valenciana, es decir, encaminado a la "privatización de los centros públicos".

Sánchez ha hecho estas declaraciones en una rueda de prensa que ha ofrecido junto al secretario general de UGT Región de Murcia, Antonio Jiménez, el secretario general de CCOO Región de Murcia, Daniel Bueno; y el presidente de la Confederación de Federaciones de Asociaciones Vecinales, Consumidores y Usuarios de la Región, Leandro Sánchez; para presentar la Plataforma Social en defensa del Estado del Bienestar y los Servicios Públicos de la Región.

En base al plan presentado por la Consejería de Sanidad en la Asamblea Regional, Sánchez cree que no se va a pagar por la atención a determinados servicios, "siempre que estén en la cartera básica común de servicios".

Recuerda que, hasta ahora, la cartera de servicios era una sola, y había intentos infructuosos de lograr una cartera uniforme en todas las comunidades autónomas".

En adelanta, apunta que "se define una cartera básica y común, que es gratuita, así como una cartera suplementaria por la que habrá que hacer un copago, y una cartera accesoria en el que habrá que hacer un pago directo o entrará a competir la provisión privada, a lo mejor, con alguna subvención pública".

"repago farmacéutico"

Por otra parte, Sánchez considera "imposible" la posibilidad de que se pueda aplicar a tiempo el "repago farmacéutico", cuya entrada en vigor estaba previsto para el mes de julio.

Sánchez ha indicado que ha hablado con compañeros que trabajan con las bases de datos y la información de tarjetas sanitarias, y cree que es "complicadísimo" el mecanismo nuevo establecido, que comprende "diferentes tramos de pagos en base a diez o doce variantes de pagos".

De momento, explica que "se desconoce si esta medida va a suponer una modificación de la receta que emite el médico en la consulta". A parecer, todo apunta a que el sistema se quiere implantar "con la receta electrónica", ya que un sistema con diez tipos de papel para elaborar recetas "es impensable".

Por tanto, considera "imposible" pensar que el sistema aplicado mediante receta electrónica "de aquí a dos tres o, incluso, seis meses". De hecho, pone como ejemplo que la Consejería de Sanidad "ha sido incapaz en cinco años de pilotar el proyecto en el área de Santomera".