La directiva en bloque de la asociación de vecinos 'Bami Unido' de Sevilla ha presentado su dimisión con motivo de lo que consideran una "inacción" del Ayuntamiento respecto a las necesidades más perentorias del barrio, con especial hincapié en la problemática de los 'aparcacoches' ilegales o 'gorrillas', cuya presión ha influido de manera decisiva en la figura de su presidenta, Laura Baños.

Ésta, en declaraciones a Europa Press, ha incidido en los ataques registrados sobre su vehículo —dos en los últimos días—, sin que ni las fuerzas y cuerpos de seguridad ni los propios vecinos colaboraran en el esclarecimiento de los hechos. "Un 'gorrilla' ha llegado a enfrentarme, pero la gota que ha colmado el vaso es que se me pueda llegar a poner en tela de juicio", ha subrayado.

El cese voluntario en sus responsabilidades de los otros cinco directivos de la asociación se ha producido en solidaridad con la figura de su presidenta. Por ello, ha subrayado, seguirá luchando contra este fenómeno, "pero como una ciudadana individual".

Y es que, para la expresidenta, la "desidia" y "parsimonia" municipal e "ineptitud" de la Delegación de Movilidad, departamento al que el Distrito Sur hace llegar las quejas vecinales, ha sido clave para la decisión de la directiva del colectivo, que ahora debe celebrar asamblea general con vistas a la convocatoria de elecciones de la que pueda salir una nueva junta; sin embargo, la afectada es de la opinión de que la asociación está en riesgo de disolución, "porque a ver quién se hace cargo ahora".

Por ello, los ya exdirectivos de 'Bami Unido' han elaborado una carta dirigida a los socios, en la que explican punto por punto los motivos de una decisión que Baños, que se considera "una buena presidenta que se ha implicado muchísimo", califica de "irreversible".

"La campaña disuasoria que se iba a realizar desde el Ayuntamiento contra el fenómeno de los 'gorrillas' se ha quedado en el reparto aislado de pocos folletos, en una campaña que ha sido absolutamente de cara a la galería", ha añadido.