Más de 600 efectivos integrarán el dispositivo especial de seguridad para el partido que jugarán a las 20,00 horas de este miércoles el Sevilla Fútbol Club y el Real Betis Balompié, que ha sido declarado de alto riesgo por la Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte.

De este modo, la subdelegada del Gobierno en Sevilla, Felisa Panadero, ha presidido la reunión de coordinación para la organización del dispositivo especial de seguridad para el partido, en la que han estado presentes también responsables de las distintas unidades de la Policía Nacional y Policía Local, del 061, así como representantes y directivos de ambos clubes.

Según ha informado la Delegación del Gobierno en Andalucía en un comunicado de prensa, en el dispositivo de seguridad intervendrán, por parte del Cuerpo Nacional de Policía, grupos de la IV Unidad de Intervención Policial (UIP), la unidad de caballería, e indicativos RAYO de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), entre otros, sumando 370 efectivos aproximadamente.

El dispositivo se completa con la intervención de 50 agentes de la Policía Local de Sevilla, servicios sanitarios y asistenciales del 061 y seguridad privada del Sevilla, con 190 efectivos.

Retirada de veladores y sillas de los bares cercanos al estadio

Los aficionados del Real Betis se concentrarán en el estadio Benito Villamarín y serán escoltados por las fuerzas de seguridad hasta el estadio Sánchez-Pizjuán. Se ha recomendado a los bares de las inmediaciones del estadio que retiren veladores y sillas, mientras que todo el mobiliario urbano de la zona será, asimismo, retirado.

Los agentes vigilarán especialmente los puntos de reunión y concentración de los seguidores de ambos clubes y las aficiones se acomodarán en sectores separados en el estadio. Asimismo, todas las puertas de acceso al estadio estarán vigiladas permanentemente para evitar la introducción de objetos cuyo porte, exhibición o consumo está prohibido por la Ley del Deporte.