La Policía Nacional ha detenido a un matrimonio y su hijo por presuntamente dedicarse al tráfico de armas, muchas de ellas militares y paramilitares, a través de su taller mecánico de Barcelona.

Según ha informado este martes el cuerpo policial, la familia tenía en su vivienda un "auténtico museo de efectos militares", con armas antiguas y de guerra, concretamente tres pistolas, un mosquetón, una carabina, 15 bayonetas, abundante munición de diferente calibre, así como grilletes, puñales, puños americanos y machetes.

Los agentes dieron también con placas-emblemas de la Policía Nacional, de la Guardia Civil y de la Guardia Urbana de Barcelona, guerreras de uniforme de la Policía Armada, de la Guardia Civil y de las SS alemanas.

En el taller donde se hacía la compraventa tenían 45 bayonetas, diez machetes, siete sables, un revólver, tres carabinas y munición de diferentes calibres, además de que en el sótano del local criaban una jineta, un sapo de gran tamaño y dos tortugas que vivían en condiciones insalubres.

Esta operación llega tirando del hilo de una actuación del mes de febrero contra un matrimonio y su hijo que regentaban un supermercado de armas en su casa y en un trastero en Sant Vicenç dels Horts (Barcelona), y que tenían un quiosco en la zona de Montjuïc.

Esta familia vendía por encargo a grupos criminales y narcotraficantes, que las usaban para ajustes de cuentas y amenazas a bandas rivales, y se les intervino uno de los arsenales más importantes de los últimos años, con un total de 64 armas de fuego -entre ellas, Kalashnikov y revólveres- y 50.000 cartuchos.

Tras esta operación, la Policía pudo localizar a uno de los clientes y colaboradores, propietario de un taller mecánico, y arrestar a principios de abril a este segundo matrimonio, él de 64 años y ella de 60, y a su hijo de 38.

Las dos familias eran aficionadas al tiro olímpico y ese era uno de sus puntos de unión, han informado fuentes policiales, y en ambos casos tenían conocimientos sobre armas que les permitían modificarlas para que el armamento de coleccionista pudiera volver a ser útil.

La operación la ha realizado la Brigada Local de Policía Judicial de la Comisaría de Mataró (Barcelona), en colaboración con la Guardia Urbana de Barcelona y el Servicio de Agentes Forestales de la Generalitat.