El Gobierno de Cantabria, por medio de la Sociedad Regional Cántabra de Promoción Turística (CANTUR S.A.), presentó ayer en los Juzgados de Primera Instancia de Santander un escrito solicitando la adopción de una medida cautelar urgente contra Western Gulf Advisory Sports Holding, B.V. (WGA), consistente en la administración judicial de las acciones que esta sociedad tiene actualmente del Real Racing Club de Santander.

Según ha informado el Gobierno cántabro en un comunicado, esta medida cautelar se solicita en apoyo de un arbitraje ya iniciado por CANTUR frente a WGA y DUMVIRO en la Corte de Arbitraje de la Cámara de Comercio de Madrid y pretende "velar" por los intereses colectivos de los ciudadanos de Cantabria, asegurando una adecuada gestión del Racing que evite, o al menos "minimice", los riesgos de frustrar el arbitraje presentado por la Sociedad Pública.

La medida cautelar solicitada por el Gobierno pasa por la designación de un administrador judicial de las acciones del Racing que son propiedad de WGA para garantizar los derechos económicos y políticos que corresponden al socio mayoritario, al menos durante la sustanciación del arbitraje y hasta que pueda ejecutarse el laudo.

Interés legítimo

El Gobierno cántabro considera que la intervención o administración judicial es la medida cautelar "más oportuna", teniendo en cuenta que el solicitante posee "un interés legítimo en mantener y mejorar la productividad del club.

Además, "es la manera de garantizar" la deuda que DUMVIRO tiene contraída con CANTUR, ya que tras la demanda presentada de DUMVIRO contra WGA, donde se espera que recupere la propiedad de las acciones del Racing, DUMVIRO se colocará de nuevo en posición de deudor de CANTUR por el precio pactado en la escritura de cesión del 21 de marzo de 2006, pero "sin garantías suficientes", al estar la deuda avalada con una prenda sobre las acciones del club propiedad de DUMVIRO y una serie de obligaciones adicionales (prohibición de disponer sobre las acciones sin el consentimiento de CANTUR, restricción del ejercicio de los derechos de voto y compromiso de protección de las acciones).

De tal manera, que esa deuda "no será plenamente efectiva" hasta que no se preserve el valor de la garantía pignoraticia, siendo necesario actuar para que las acciones del Racing de Santander no se perjudiquen ni disminuyan su valor durante el tiempo que estén en posesión de WGA, cuyo título de propiedad ha sido resuelto extrajudicialmente por sus incumplimientos, explica el Ejecutivo.

Riesgos reales

En opinión del Gobierno de Cantabria, "de nada serviría" reponer a CANTUR en sus derechos como acreedor frente a DUMVIRO, si en el tiempo que dura el proceso, WGA transmite las acciones del Racing de Santander a un tercero. Tampoco sería plenamente efectivo el laudo si durante la sustanciación del arbitraje, y hasta que pueda ser ejecutado, WGA realiza actuaciones que disminuyan el valor de la garantía.

CANTUR volvería a ser acreedor de DUMVIRO, pero lo sería en condiciones "muy distintas" de las que tenía antes de la firma del Acuerdo Marco, frustrándose así la tutela arbitral que se ha solicitado.

El Gobierno estima que los riesgos expuestos "son reales", ya que los responsables de WGA han manifestado públicamente que no tienen intención de cumplir lo pactado en el contrato de compraventa que firmó con DUMVIRO ni en el acuerdo de reconocimiento de deuda que suscribió con CANTUR, entendiendo que la operación de WGA fue "puramente especulativa" y existe la posibilidad de que se vendan a un tercero en cualquier momento o comparecer a la Junta General Extraordinaria convocada judicialmente para el próximo mes y nombrar un nuevo Consejo de Administración, con facultades para decidir en todos los sentidos.