En tres años, los sevillanos hemos logrado malgastar cuatro litros menos por vecino al día, según los datos de Emasesa.

De hecho, en Sevilla y parte de su área metropolitana se consumen entre 10 y 20 litros menos que la media española, cuyo gasto se sitúa entre los 150 y los 160 litros por habitante y día.

Las cuentas de 2004 de la empresa municipal de agua también reflejan que las inversiones en redes de saneamiento se redujeron más de un 50% en 2004 debido a la finalización en 2003 de los proyectos financiados por el Fondo de Cohesión. Ya para este año, y hasta el 2013, habrá una inyección de entre 30 y 40 millones de euros para mejoras cada doce meses.

Aún no hay sequía

Entre el ahorro y los embalses, la ciudad tiene garantizada el agua para dos años. Emasesa asegura que «el año ha sido seco, pero no hay sequía». Los pantanos que nos abastecen aún están al 80%.

El problema llegará si la escasez de chubascos se prolonga esta primavera y en otoño. Entonces se activarán las primeras alarmas y Emasesa comenzará a tomar medidas.

La falta de lluvias no sólo se ha notado en la capacidad de los pantanos, sino que ha hecho estragos en la producción de energía eléctrica de la empresa municipal de aguas. Emasesa ha dejado de generar la electricidad habitual por reservar agua para asegurar el abastecimiento. Mientras que en 2003 facturó por su venta más de dos millones de euros, en 2004 se ha reducido a los 729.00 euros.

María Jesús Magro. Villaverde del Río. 16 años. «El salón me ha gustado mucho. He preguntado por las salidas profesionales y las notas de corte de distintas carreras. He venido con compañeros del instituto».

David Calvo. Villaverde del Río. 15 años. «El salón me ha gustado. Hay demasiada gente preguntando en los expositoress. Creo que ha valido la pena. Me llevo muchos papeles. Quiero estudiar arquitectura».

María del Carmen Larrea. Sevilla. 17 años. «Me llevo muchos folletos sobre idiomas, lo que quiero estudiar. Tengo hasta finales de junio para decidirme. El salón está bien para resolver dudas».

Sonia Guerrero. Coria del Río. 18 años. «Es la primera vez que piso la Universidad y me ha gustado. Quiero estudiar medicina, pero el estudiante que me podía explicar la carrera no ha venido. Me llevo muchos folletos».