Los jardines de estilo romántico y con una superficie de 2.000 metros cuadrados se abrirán al público.

La regidora del distrito de Horta-Guinardó, Elsa Blasco, subrayó la importancia de la adquisición, ya que, según ella, «nuestras fábricas son las masías, y Can Fargas es la más emblemática de todas».

En 1998, la masía fue adquirida por la inmobiliaria Unicompta, propiedad de la família Vilaragut, por el valor de 195 millones de las antiguas pesetas. La inmobiliaria tenía intención de construir una escuela de hotelería, con un restaurante de lujo en la masía, y una residencia para ancianos en una parte de los jardines.

La inmobiliaria rechazó las permutas de varios  terrenos que le ofreció el Consistorio. La negociación, pues, se prevé dificícil.