El escritor y filósofo Fernando Savater ve "curioso" que en los más de cien días de Gobierno del PP en España "estamos oyendo más voces críticas de intelectuales sobre la situación y los recortes de las que hemos oído durante ocho años anteriores, en los que hemos descendido por la pendiente hasta llegar donde estamos ahora".

De esta manera, el actual Premio Primavera de Novela 2012 por 'Los invitados de la princesa', que ha presentado este miércoles en Sevilla, ha señalado que, a pesar de que la cultura está "bastante mal" por el abandono de las inversiones culturales por parte de los ciudadanos y la falta de espacios públicos para hacerse oír, "siempre hay algunos que se hacen oír".

Además, durante la rueda de prensa, ha añadido al respecto que "últimamente hemos oído bastante voces críticas", que "desgraciadamente" no hemos oído a lo largo de los últimos años. "Lo curioso es que en los más de cien días del PP estamos oyendo más voces críticas sobre la situación y los recortes de las que hemos oído durante los ocho años anteriores en los que hemos descendido por la pendiente hasta llegar donde estamos ahora", ha reiterado.

'Los invitados de la princesa' (Espasa) parte del enclaustramiento fortuito que sufren un grupo de intelectuales y periodistas, en la isla de Santa Clara, en el Atlántico Sur, cuando entra en erupción un volcán en el territorio isleño. El periodista vasco Xabi Mendía será el encargado de levantar acta de la paradójica situación y de escuchar las historias que unos y otros cuentan. De esta manera, tras los debate y conversaciones de los personajes, Savater hilvana siete historia con siete voces diferentes enmarcadas en distintos géneros literarios como la ciencia ficción, la novela fantástica, la novela de intriga o la de terror.

Entre las discusiones de los personajes de esta novela se cuela el terrorismo, como ya apareciera en una anterior obra del profesor de Filosofía vasco 'La hermandad de la buena muerte'. En este sentido, el escritor ha reconocido que "cuando incluye un grupo terrorista en la ficción lo hace pare reírse de ellos, pues aunque tengan —los terroristas— un lado trágico, no les dará el gusto de sacarlos con su cara de dar miedo, sino de dar risa".

Con respecto al panorama en el País Vasco en relación a la banda terrorista ETA, Savater ha indicado que "todos tenemos mucha esperanza de que, gracias a nuestro esfuerzo, al de parte de la sociedad, de las fuerzas del orden y la justicia, y no a un acto de generosidad de ETA, al final se ha dado un giro a la situación".

En este sentido, ha apuntado que "han perdido y no tienen más remedio que vender esa derrota como una victoria política". No obstante, cree que "se le está prestando demasiado caso" a ETA, sobre todo, con la cuestión de los presos. "Para la banda los presos son importante, pero para los demás no, pues están juzgados y cumplen condena", ha aclarado.

"Colectivamente no merecen ningún premio, sino que se les niegue cualquier tipo de concesión", ha añadido. En esta línea, ha insistido en que esta cuestión es "una trampa" de ETA, que quiere reivindicarlos porque esto significa "reivindicar" a la banda.

La postura del gobierno, "LÓGICA"

Por todo ello, ha lamentado que "se está haciendo un juego excesivo a los etarras en el País Vasco", porque, a su juicio, el Gobierno de Mariano Rajoy, al menos, "mantiene una postura lógica". En referencia a la "hoja de ruta", Savater ha afirmado que ésta tiene sentido "cuándo quieres ir a alguna parte" y que él "no quiere ir a ninguna parte, y menos con los etarras o los amigos de los etarras; sino que quiere quedarse en la España constitucional y democrática", ha concluido.

En referencia a la novela, el escritor ha señalado que este nuevo trabajo sigue "la venerable tradición" de Chaucer o Boccaccio, esto es, recoge historias de un grupo de personas encerrados y obligados a convivir por causas externas como es la nube de ceniza de un volcán que cierra el espacio aéreo de la isla Santa Clara, donde han sido convocados por la presidenta, conocida como 'La Princesa', para participar en un "festín cultural". En este encuentro de escritores y periodistas debatirán sobre política, filosofía, teología o educación.

Los personajes, según ha explicado, se encuentran encerrado "en una búrbuja", a través de la que ha intentado el autor reproducir el ambiente y la realidad de los congresos de agentes culturales o escritores. En este encuentro desarrollarán sus resignaciones, debatirán sus ideas, enfrentarán sus pequeños narcisismos y rencillas de reuniones anteriores.

Savater ha señalado que a estos congresos, "organizados de forma folclórica por los gobernantes en su apoyo o para ensalzar un nacionalismo barato", las personas van con buena voluntad y pensando que desde dentro "pueden cambiar las cosas". No obstante, el escritor ha reconocido que "si no se hicieran, no habría ocasión de oír ciertas voces".

"la gente está harta de los libros de tesis"

El escritor vasco ha aclarado que 'Los invitados de la princesa' "no es un libro de tesis", porque después de haberse pasado la vida escribiendo este tipo de obras, "la gente está harta y yo también de escribirlos", ha confesado, al tiempo que ha reconocido que "ahora quiere hacer literatura para el disfrute del lector".

En este sentido, ha comentado que le hace disfrutar "las cosas que tienen una cierta dimensión de inteligencia y reflexión", pues "las tonterías y los tontos no me divierten". Por todo ello, ha apuntado que quiere hacer "libros entretenidos de modo inteligente, que no humille la inteligencia del escritor, sino que la potencie". "Ahora, después de 40 años dedicados a la enseñanza de la filosofía, quiero cumplir un sueño infantil, ser literato", ha confesado.

Para Savater, los personajes de las novelas son "criaturas del doctor Frankenstein, hechos de pedazos de personas que uno —escritor— conoce y que los ensambla". Además, ha admitido que la "gracia" de los personajes ficticios es que "uno puede decir lo que le parece sin poner su nombre debajo".

Entre otras cuestiones, Savater ha reconocido que la situación de encierro de los personajes en la isla por la erupción del volcán es un hecho que él mismo vivió hace dos años, cuando la nube de ceniza provocada por un volcán islandés le dejó sin poder salir de un congreso de escritores que se celebraba cerca de Milán (Italia).