El descubrimiento "casual" de unos cuadernos escritos por Christiana Morgan mientras investigaba para otra novela fue lo que alzó al escritor mexicano Jorge Volpi al Premio Planeta-Casa América, dotado con 153.000 euros, por su libro La tejedora de sombras.

En él describe la desgarradora y obsesiva historia de amor y la intensa relación con el psicoanálisis que tiene Morgan con su amante, el fundador de la clínica psicoanalítica de Harvard, Henry Murray, y con Carl Gustav Jung, uno de los padres de esta doctrina.

Volpi, según se define él mismo en una entrevista con 20minutos, es un "apasionado con ambigüedades" del método del psicoanálisis. Y lo ha reflejado en varias de sus novelas, como El fin de la locura. Y si bien confiesa que le gusta leer a Freud para "entender" a la sociedad actual, duda "completamente" del carácter científico del método y de su "condición de terapia".

El escritor califica a Christiana Morgan como una mujer "rompedora" y "apasionante", que "intentó romper con los convencionalismos de su época, con los prejuicios de su tiempo". Esposa de un veterano de guerra, en 1925 se enamoró de Murray, también casado, y fueron amantes durante 42 años. A ojos del autor, su relación "es una de las últimas grandes historias de amor romántico". Por el tiempo en el que se produjo y por la intensidad.

Volpi cree que hoy en día, "aunque seamos irónicos respecto al amor, la intención de tener un final romántico y feliz se mantiene intacta". Culpa de ello la tienen, dice, las comedias de Hollywood y las telenovelas. Aunque, reconoce, que si se fuera más allá, "las relaciones que nos muestran acabarían mal".

Dos son los proyectos inmediatos de Jorge Volpi. Está sumergido en la escritura –"una novela larga que me llevará tiempo", asegura– y en volver dar clases de Literatura en la universidad.

*Consigue un ejemplar de La tejedora de sueños en PopularLibros.