El aspirante a la candidatura presidencial republicana Mitt Romney  afianza su condición de favorito tras obtener una incontestable victoria de este martes en las primarias de Maryland, Distrito de Columbia (Washington D.C) y Wisconsin, para avanzar en la batalla por la candidatura republicana para disputar la Casa Blanca en noviembre.

Este resultado consolida al ex gobernador de Massachusetts frente al ex senador de Pensilvania Rick Santorum.

En Maryland yy el D.C., se impuso por una holgada diferencia, confirmando la tradición de Maryland y la capital estadounidense como feudos del ala moderada del partido republicano.

En Wisconsin, Romney logró imponerse igualmente, pero por un margen más reducido a Santorum, según las proyecciones, a falta de completar el escrutinio total.

"Gracias Maryland, Distrito de Columbia y Wisconsin, ha sido una gran noche. Las ganamos todas", dijo Romney en un comparecencia tras conocerse los resultados en Milwaukee, la sede su campaña en Wisconsin.

Ahora la carrera por la candidatura republicana toma un respiro de tres semanas hasta el próximo 24 de abril, en el que se celebrarán primarias en cinco estados: Nueva York, Connecticut, Delaware, Rhode Island y Pensilvania.

Los cuatro primeros, encuadrados en la costa noreste, son territorio más favorable a Romney, de perfil más moderado y que ha vivido durante mucho tiempo en la zona.

Por su parte, Pensilvania, estado natal de Santorum y al que representó en el Senado de EEUU durante más de una década, se sitúa como el siguiente punto de inflexión en el pulso entre ambos candidatos.

Romney reiteró sus ataques al presidente estadounidense Barack Obama y subrayó compromiso de volver "a situar a EEUU como la tierra de las oportunidades".

"Cuando atacas los negocios y vilipendias el éxito, vas a tener menos negocios y menos éxitos", afirmó al criticar los programas públicos lanzados por parte de la Administración Obama.

Los otros dos aspirantes, el ex presidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich y el congresista Ron Paul, se quedaron muy por detrás, y confirman el duelo entre el moderado Romney y el ultraconservador Santorum.

En eta jornada había 92 delegados en juego: 16 del Distrito de Columbia, 37 de Maryland y 39 de Wisconsin.

Las primarias de Wisconsin son las que concentraban más atención, ya que los otros dos lugares en los que se celebraron elecciones, Maryland y el Distrito de Columbia (donde Santorum ni siquiera aparece en las papeletas), parecían decantados para Romney.

Por su parte, Santorum buscaba en Wisconsin arrebatar una victoria sorpresa a la potente maquinaria electoral de Romney y mantener viva la esperanza de recortar distancias en la carrera por los 1.144 delegados necesarios para alzarse con la candidatura republicana en la convención de agosto en Florida.

Romney lleva ya más de la mitad de los delegados y también más del doble que los de Santorum.

El ex senador Rick Santorum reivindicó sus credenciales conservadoras tras conocer la victoria de su rival y advirtió que "solo estamos en la mitad del partido".

"Es medio tiempo, y demostraremos una fuerte segunda parte en Pensilvania", dijo Santorum, en referencia a las próximas primarias el 24 de abril en su estado natal.

Santorum criticó a Romney al subrayar que el partido republicano necesita "contrastes de color claros con Obama para imponerse" en las elecciones presidenciales de noviembre.

"Estados Unidos necesita un presidente con convicciones acero. No vamos a ganar moviéndonos hacia el centro político, necesitamos mover a la gente desde el centro hacia nosotros para que EEUU avance", agregó.

Santorum ha marcado las primarias de Pensilvania como un punto clave para conocer su posibilidades de mantenerse en la batalla por la candidatura.

"Después de ganar Pensilvania, el campo va a aparecer diferente en mayo, y tenemos la intención de vencer en las primarias de Texas el 29 de mayo", concluyó.