La presidenta de CSIF en Granada, Mercedes Casares, ve con "preocupación" la situación de los empleados públicos en la provincia granadina ante "los recortes" aplicados por las distintas administraciones y ha garantizado, tras haber renovado su cargo en el congreso del viernes, que el sindicato "seguirá trabajando para defender sus derechos".

En declaraciones a Europa Press, Casares, que fue elegida por el 86 por ciento de los compromisarios en el congreso, ha lamentado el retroceso que están sufriendo los logros sindicales conseguidos en los últimos 30 años, tanto en el sector público como en el privado, donde CSIF "está incrementado su presencia".

"En el sector privado están un poco cansados de los típicos sindicatos de clase y CSIF no es que haya nacido ayer, tiene 30 años de historia", ha comentado la sindicalista.

En lo que se refiere al sector público, ha opinado que está padeciendo "uno de los mayores ataques de todos los tiempos", con recortes salariales y de oferta pública de empleo, lo que a su juicio supone también "un ataque a la sociedad", que es quien se beneficia de la prestación de servicios.

"Desde CSIF siempre hemos apostado por que los servicios sean de calidad, no se puede tocar los servicios públicos porque se está tocando el Estado de Bienestar", ha añadido la presidenta provincial de CSIF.

Para Casares es prioritario en este nuevo mandato consolidar lo ya conseguido el sindicato y seguir aumentando su representatividad, que "ya cuenta con mayoría en muchos sectores de Granada".

Asimismo, ha defendido que CSIF es un sindicato "independiente que no está adscrito a ningún partido y que trabaja por el bien de sus afiliados". Para Casares, estos cuatro años han sido muy importantes para "rentabilizar" las siglas y ha confiado en mejorar la representación del sindicato en el mandato que ahora empieza.