El diputado regional Francisco Fernández Mañanes ha ofrecido a la dirección regional del PSOE un pacto para consensuar los componentes de los órganos que rijan el desarrollo del Congreso regional, que elige al nuevo secretario general del partido.

Mañanes es candidato a ese cargo, frente a —de momento— la vicesecretaria general, Eva Díaz Tezanos, en la cita que se celebra desde este viernes, y del que surgirá el próximo secretario general, sucesor de Dolores Gorostiaga.

A la hora de celebrarse el Congreso, hay una serie de órganos como la Mesa o los encargos de contar los votos, y son para los que Fernández Mañanes ha realizado una oferta, sobre la que no ha querido precisar nombres.

Se trata de que estos órganos tengan "la máxima garantía", en cuestiones como el "secreto" del voto o la independencia de sus miembros, ha señalado Mañanes, quien ha descartado que realice esta propuesta por desconfianza en lo que pudiera proponer la dirección del partido.

Además, el candidato se ha mostrado dispuesto a participar en debates con sus rivales ante los medios, y ha defendido al respecto que el PSOE "no debe tener miedo a los debates".

Contactos con gómez morante

El exportavoz parlamentario ha rechazado el "espectáculo poco edificante" de las atribuciones de delegados, insistiendo en que estos son "independientes" y que el Congreso está "abierto", de modo que en estos momentos "no hay nada decidido".

En este sentido, tiene la "convicción" de que los que apuestan por el "cambio" son más, por lo que confía en cerrar, finalmente, un acuerdo —aún no sellado— con la exalcaldesa de Torrelavega, Blanca Rosa Gómez Morante, con quien "habla permanentemente".

"máxima integración"

El candidato cree que del Congreso debe surgir una dirección con la "máxima integración". Él se ha comprometido a hacer el "máximo esfuerzo" para integrar en "la misma dirección" a todos los que quieran "contribuir" a mejorar el partido.

"Yo quiero ganar este Congreso para que gane el PSOE", ha defendido Fernández Mañanes, quien también ha reiterado su voluntad de integración "sin preguntar a nadie de donde viene o a quien voto".

De lo que se trata, ha insistido, es de que el PSOE sea fuerte para "poder hacer frente a la derecha" y a sus políticas conservadoras en Cantabria, del mismo modo que ha sucedido en las recientes elecciones asturianas o andaluzas.