Unos 8.000 desempleados, alrededor de 500 delegados y delegadas y más de una veintena de empresas granadinas han hecho pública su adhesión a la huelga general, según ha informado el secretario general de CCOO de Granada, Ricardo Flores, que ha confiado en que la jornada suponga una respuesta "contundente" de los ciudadanos "ante las agresiones que estamos sufriendo por parte del Gobierno del PP".

El sindicato ha conseguido además la adhesión de los comités de empresa de centros de trabajo emblemáticos de la provincia, como son el Hospital Virgen de las Nieves, el Balneario de Lanjarón, Transportes Rober, Cetursa Sierra Nevada, Renfe o el Patronato de la Alhambra y el Generalife.

Además, según CCOO, han firmado el documento de apoyo a la huelga general los comités de empresa de Lidl, Akí, Hotel Meliá Sierra Nevada, Hotel Alhambra Palace, Supersol, Hotel Saray, Zara, Alcampo, Covirán, Lo Monaco, Dia, Pull & Bear, la Escuela Andaluza de Salud Pública, Claros SCA, la Residencia Nuestra Señora de Fonseca y la Residencia Caxar de la Vega.

También más de 8.000 desempleados han querido firmar su adhesión a la huelga manifestando que si estuvieran trabajando la secundarían. Por este motivo, han mostrado su disposición a participar activamente en las manifestaciones que se celebrarán en la provincia el próximo 29 de marzo, ya que entienden que esta reforma es un "ataque a los derechos de los desempleados y desempleadas y no generará empleo".

Ricardo Flores también ha explicado que se han "duplicado" las personas que han acudido a los sindicatos por despidos y modificaciones en sus condiciones de trabajo, "que es la antesala al despido", desde que se puso en marcha la reforma laboral y por este motivo ha considerado "más necesaria que nunca" la convocatoria de huelga. "El país, más que una reforma laboral, necesita una reforma del sistema fiscal, completar la reforma del sistema financiero y lograr que el crédito llegue a la economía a través de las familias y empresas", ha sostenido.

Para el secretario general de CCOO de Granada, el Gobierno "no ha dejado otro camino que el de más manifestaciones y huelga general". En su opinión, se está utilizando a los parados, y en especial a los jóvenes, como "rehenes" para "chantajear" al conjunto de la sociedad y atacar, por medio de la reforma laboral, los derechos laborales y llevar a cabo políticas de recortes. "Se está intentando agitar el miedo para que la gente no participe en la huelga", ha terminado Ricardo Flores.