'Un Réquiem Alemán' más "íntimo", con dos coros y dirigido por Spering desembarca mañana en el Calderón de Valladolid

'Un Réquiem Alemán' de Johannes Brahms "más íntimo", con dos formaciones corales y dirigido por el alemán Christoph Spering desembarcará mañana, martes 27 de marzo, en el teatro Calderón de Valladolid en un concierto homenaje al 125 aniversario de la fundación de la Sociedad Coral de Bilbao.
Ibone Bengoetxea, Mercedes Cantalapiedra Y José María Viteri
Ibone Bengoetxea, Mercedes Cantalapiedra Y José María Viteri
EUROPA PRESS
Ibone Bengoetxea, Mercedes Cantalapiedra Y José María Viteri

'Un Réquiem Alemán' de Johannes Brahms "más íntimo", con dos formaciones corales y dirigido por el alemán Christoph Spering desembarcará mañana, martes 27 de marzo, en el teatro Calderón de Valladolid en un concierto homenaje al 125 aniversario de la fundación de la Sociedad Coral de Bilbao.

Es precisamente esta formación, junto al Chorus Musicus Köln, la soprano Eva Mei, el barítono Josep-Miquel Ramón y la Das Neue Orchester la que protagonizará el 'Réquiem', que se estrenará el día 26 en el teatro Arriaga de Bilbao y que, tras su paso por Valladolid, se interpretará el día 28 en el Palau de la Música de Barcelona, donde la Sociedad Coral de Bilbao lo estrenó en 1913.

La propuesta desarrollada por la Fundación Bilbao 700 "no es la habitual", según lo ha explicado el director artístico del teatro Calderón, José María Viteri, quien ha detallado que en la iniciativa no toma parte la totalidad de la Sociedad y que, además, los participantes comparten escenario con la formación vocal alemana.

Se trata, por tanto, de una versión "más íntima" que no busca ser "un concierto al uso" de la obra, sobre la que Brahms trabajó entre 1862 y 1865 y que se desarrolla a lo largo de siete movimientos: 'Bienaventurados los que sufren' y 'Entonces toda carne es como la hierba', primero y segundo, ambos para coro; 'Enséñame por tanto, señor', para barítono y coro; 'Qué dulces son tus moradas', para coro, y 'Ahora estáis tristes', para soprano y coro.

Los dos últimos movimientos son 'No teniendo en la tierra una morada duradera', para barítono y coro, y 'Bienaventurados los muertos', para coro, que cierra la obra.

El concierto cuenta con una "gran carga simbólica", según la concejal de Cultura de Bilbao, Ibone Bengoetxea, quien ha aprovechado para ensalzar la figura de la Sociedad Coral, creada en 1886 y que en 1973 llegó a crear su propio Conservatorio, que actualmente cuenta con 500 alumnos y profesores.

Bengoetxea ha trasladado, además, su deseo de que ambas ciudades sigan aprovechando oportunidades para seguir colaborando ya que existen "amplias posibilidades", especialmente en el terreno cultural. "No podemos prescindir de la cultura aún en estos tiempos de crisis", ha aseverado antes de referirse al "vínculo especial" que une a ambas ciudades y que se visualiza en la amistad que mantienen los dos alcaldes.

En los mismos términos se expresó su homóloga de Valladolid, Mercedes Cantalapiedra, quien ha señalado que el concierto, "un excelente programa", es "todo un acontecimiento musical" que la ciudad de Bilbao "ha querido compartir con la de Valladolid".

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