Los secretarios regionales de UGT y CC.OO., Agustín Prieto y Ángel Hernández, respectivamente, han lamentado este viernes el cambio de rumbo que se ha producido en el seno de la Junta de Castilla y León, a la que han acusado de no haber querido negociar los servicios mínimos para la huelga general del 29 de marzo, y han advertido de que esa "intransigencia" quita valor a la firma y a la declaración institucional suscrita con el presidente del Ejecutivo, Juan Vicente Herrera, y les hace "recapacitar y rebobinar".

"O Herrera va por un lado y sus consejeros por otro o no lo entendemos", se ha preguntado Prieto, quien ha insistido en que tanto a UGT como a CC.OO. les hubiera gustado haber llegado a un acuerdo con la Administración regional sobre el establecimiento de los servicios mínimos para el jueves 29, como ha ocurrido en regiones vecinas como Madrid.

"Aquí han sido insensibles e incapaces", ha lamentado el líder regional de UGT, al que ha secundado su homólogo en CC.OO para quien "tiene que haber algún tipo de nerviosismo" en la Consejería responsable de la Función Pública, la de Hacienda, a la que ha acusado de haber convocado a los sindicatos sólo un día antes de llevar los servicios mínimos al Consejo de Gobierno, lo que ha calificado de "pantomima".

Hernández ha informado al respecto de que los sindicatos estudiarán si recurren ante la Justicia el decreto de servicios mínimos, un procedimiento que ha cifrado en un coste de unos 4.000 euros cuando "no están los tiempos para tirar los euros".

Tras asegurar que el Gobierno autonómico ha "metido la pata" tanto en el fondo como en las formas, Ángel Hernández ha trasladado la misma queja al Grupo Parlamentario Popular, al que ha acusado de haber desaprovechado "una oportunidad de oro" al negarse a favorecer ahora el debate en las Cortes sobre la reforma laboral, como habían pedido los grupos socialista y mixto.

En este punto, ha ironizado respecto a la posibilidad de que en el PP hayan querido dejar un tema "candente" para dentro de tres meses, "cuando no le interesa a nadie salvo que haya alguna gratificación".

A su juicio, la negativa del Grupo Popular a debatir este asunto en las Cortes de debe a que los procuradores 'populares' no tienen argumentos para defender las "bondades" de la reforma laboral. "Como no las hay no quieren entrar en el debate", ha sentenciado Hernández, para quien en ambos casos se trata de un error de bulto que afea la posición que firmaron en su día CC.OO y UGT con Herrera. "Lo lamento muchísimo", ha concluido.

En el mismo sentido se ha pronunciado Prieto, para quien la negativa del PP de llevar el debate sobre un posible recurso de inconstitucionalidad a la reforma laboral al pleno de la próxima semana demuestra la "soledad e intransigencia" de los 'populares'. "Ni siquiera han tenido la valentía de que pase a debate. Lo dejan para cuando esto esté enfriado", ha cuestionado el secretario regional de UGT, para quien la reforma laboral atenta incluso contra el Estatuto de Autonomía.